La detención la semana pasada de tres miembros del aparato militar de ETA sigue dando frutos. La operación ha permitido ya localizar diez zulos de la banda, los tres últimos descubiertos ayer también en Francia con 209 kilogramos de material para explosivo.
Las fuerzas de seguridad francesas encontraron ayer tres nuevos escondites de la banda terrorista ETA, uno de ellos cerca de la localidad de Minerve, en el departamento mediterráneo de Hérault, al sureste de Francia. En este lugar, los terroristas ocultaban "placas de vehículos", según las fuentes.
El segundo zulo fue encontrado en la localidad de Parailhan, en el mismo departamento y en el que se encontraron más de 200 kilogramos de explosivos. En la localidad de Montclar, al noreste de Toulouse, se encontró el último zulo. Allí se intervinieron 117 placas de matrícula vírgenes.
Por último, también ayer se abrió un zulo ya descubierto la semana pasada, aunque en su interior solamente albergaba dos bidones vacíos. En total, pues, son diez los escondites de la banda descubiertos desde el pasado miércoles en el sur de Francia, día en que se puso en marcha la operación policial que permitió el arresto de los presuntos etarras Alberto Machaín, Andoni Sarasola y Aitzol Etxaburu, considerados los responsables de suministrar armas y explosivos a los comandos de la banda.
A los zulos abiertos ayer se suman otros tres descubiertos el pasado viernes, -uno en Minerve, otro en la comuna de Ferrals-les-Montagnes y otro cerca de Vieussan-; otros dos hallados el jueves, -en la localidad de Camplong y en Helette-, y uno más el miércoles en Ferriéres, cerca de la frontera con España.
Las Fuerzas de Seguridad han intervenido en todos estos escondites media tonelada de explosivos, además de armas y munición, y una gran cantidad de componentes electrónicos con los que se hubieran podido confeccionar decenas de bombas-lapa. Se ha hallado incluso algún temporizador similar al utilizado para el atentado mortal de Calvià.
Mientras tanto, la juez antiterrorista francesa Laurence Le Vert comunicó el domingo por la noche a los presuntos miembros de ETA Aitzol Etxaburu, Alberto Machain y Andoni Sarasola -detenidos la semana pasada- su imputación por un delito de asociación de malhechores para cometer actos terroristas.
La juez decretó prisión provisional para los tres arrestados, que han sido encarcelados en las cercanías de París, según las mismas fuentes. La juez les imputa también otros cargos relacionados con el delito de terrorismo.
En estas circunstancias, el rey Juan Carlos recibió ayer al secretario de Estado de Turismo, Joan Mesquida, en su residencia veraniega de Marivent, situada en Mallorca, para conocer el estado en el que se encuentra este sector en España, especialmente tras los últimos atentados perpetrados por ETA en la isla. Mesquida ya confirmó el pasado 10 de agosto que las diferentes oficinas de turismo que hay alrededor del mundo habían indicado al Gobierno central que la gente no alteraría sus vacaciones tras los atentados que tuvieron lugar en varios establecimientos de Palma.
Mesquida reconoció que todavía es pronto para realizar valoraciones, pero puso el ejemplo de la Familia Real, que no ha variado sus planes de pasar sus vacaciones en Mallorca. "Evidentemente, nadie lo hará", dijo.
Francia detuvo ayer, por otra parte, a Iñaki Telletxea, integrante del desarticulado comando Ibarla de ETA, por violar una prohibición que le negaba la entrada en este país por pertenencia a asociación de malhechores con fines terroristas.
Una euroorden dictada por Baltasar Garzón permitió que fuera detenido en 2007 en Hendaya junto con Javier Irastorza y Marcos Sagarzazu. Este comando de ETA asesinó al policía Eduardo López Moreno y al ex jefe de la Ertzaintza en Guipúzcoa Ramón Doral, entre otros.
