Los servicios municipales del Ayuntamiento de Sevilla han desmantelado un total de 11 asentamientos en Triana y el entorno de la Cartuja, donde han localizado a 21 personas y han retirado 740 kilos de basura. En una nota, el Ayuntamiento informó de que el dispositivo ha estado formado por la Unidad de Medio Ambiente de la Policía Local, el equipo de emergencias sociales del Ayuntamiento y personal de la plantilla de la empresa municipal de limpieza Lipasam. En dicha actuación fueron localizadas 21 personas y se retiraron diez tiendas de campaña, una chabola, dos carritos de la compra y 740 kilos de basura.
Concretamente, en el barrio de Triana se retiraron asentamientos sin localizar a personas en Pasaje de la Inquisición, calle Castilla esquina Torre Maphre, calle Aracena, Parque del Turruñuelo, San Vicente de Paúl, calle Virgen de las Torres, Ronda de los Tejares y Barrio de la Dársena. Asimismo, en el entorno de la Isla de la Cartuja, cercano al Centro de Alto Rendimiento, se localizaron a tres personas, una chabola y dos tiendas, así como se retiró "gran acumulación de basura".
Además, en Puerta Triana los servicios municipales localizaron a diez personas, dos tiendas, dos carritos de la compra y una bombona de butano, mientras que, por último, en el Paseo Juan Carlos I se hallaron a un total de ocho personas y seis tiendas, así como Lipasam retiró enseres personales.
Los perfiles de estas personas son muy variados, desde quienes se quedaron sin trabajo y sin casa por un bache económico y ya nunca lograron remontar, hasta los que se engancharon a alguna adicción. Con frecuencia sufren trastornos mentales, que se agravan por las condiciones de vida que llevan en la calle. En Sevilla rondan los 200, según los cálculos de las ONG. Las entidades que trabajan con ellos alertan además de que la falta de alternativas sociales ha llevado al estancamiento de las políticas destinadas a los sin hogar, que no se están adaptando a las nuevas realidades. Aseguran que a quienes llevan años viviendo en Sevilla se les han sumado en los últimos dos años muchos extranjeros de un perfil distinto, a veces con niños, que van de camino a alguna campaña de recogida agrícola.
