A los grandes desvíos del tráfico rodado previsto en el proyecto constructivo de la línea 3 del Metro de Sevilla , entre Pino Montano y Bermejales, se suma el del Metrocentro. El tranvía tendrá que cambiar su recorrido en el Prado y la avenida de Carlos V, lo que costará 10,97 millones de euros según el presupuesto base de licitación.
En esta cantidad se incluyen el IVA, el beneficio industrial y los gastos de cobertura, ya que el presupuesto material de la obra es de 7,8 millones de euros, según reza en el detallado proyecto constructivo de la línea, marcada como preferente por la Junta. De hecho, si finalmente supera el escollo de la financiación bancaria, el Gobierno andaluz tiene previsto licitar la obra este año para que el contrato se firme en enero de 2013 y los trabajos comiencen en marzo de ese año. El objetivo es que el primer tramo, de Pino Montano al Prado, pueda estar en servicio en enero de 2017.
Y es que las obras precisan cuatro años, lo que conllevará múltiples molestias en la movilidad de la ciudad. Sólo en la Ronda Histórica, como informó este periódico, los trabajos tardarán alrededor de 23 meses y obligarán a importantes desvíos del tráfico. Y todo ello mientras no se presenten imprevistos.
En el caso del desvío del tranvía, al llegar al Prado por la calle San Fernando rodearía la fuente por el lado derecho, y no por el izquierdo como ahora, para transitar por la acera de los jardines en Carlos V. No volvería a su trazado original hasta llegar a la Enramadilla. En concreto, se tendrán que levantar 775 metros del tranvía, según el proyecto que el pasado miércoles presentó la Junta al sector de la construcción, ingenierías, entidades financieras y consultorías. Incluso la parada tendría que cambiar de acera.
Lo que está por ver es si la obra de la línea 3 en el Prado afecta al proyecto del Gobierno local del PP para instalar la Ciudad de la Justicia en el Prado. En concreto, al edificio que se levantaría junto a la estación de autobuses, donde se planeó el edificio de Moneo, según el PP. En principio, el trazado del Metro sólo está previsto bajo la calzada, pero el alcalde, Juan Ignacio Zoido, aseguró que hasta no conocer si afecta no concretará su propuesta para ubicar la ciudad judicial.
El primer tramo de la línea 3 presenta dos puntos conflictivos desde el punto de vista técnico: el paso bajo el aparcamiento subterráneo del hospital Virgen Macarena (donde la excavación será a 20 metros de profundidad, y no a 10 como en el resto) y la conexión con la línea 1 en el Prado (la línea 1 y la 3 compartirán el vestíbulo de la estación y tendrán accesos diferentes a los andenes).
En todo el recorrido se usará el mismo método constructivo que se utilizó en los años 60 para los viejos túneles de Nervión y Su Eminencia, los muros-pantalla (no la tuneladora), así que se abrirán las calles en canal.
Otro punto conflictivo es el paso por encima del doble túnel de la línea 1 en la Enramadilla, en la Glorieta de Doña María de las Mercedes, ya que se tendrá que reforzar estructura para que sobre ella no recaiga el peso del nuevo túnel, y, sobre todo, el paso bajo el túnel de Cardenal Bueno Monreal, donde el suburbano irá a 20 metros de profundidad.
La línea 3 costará 1.179 millones de euros, según el presupuesto base de licitación (839,96 de ejecución material) e incluye partidas como los 85 millones para desvíos de servicios afectados (redes de agua, luz, gas...) o los 8,5 para el estudio ambiental y las medidas correctoras (pantallas antirruido, reposición de árboles...). La obra civil cuesta 543 millones, de los que 283 se gastan en el túnel y 418 en estaciones. La más cara (62,80 millones) es la del hospital Virgen Macarena por el parking. Le sigue la estación de la Palmera (63,20) por ser un intercambiador.
