Un vecino de Chiclana (Cádiz), de 33 años, pasó ayer a disposición judicial después de que la Guardia Civil lo pusiera bajo arresto, acusado de violar a una chica menor de edad con quien contactó a través de la red social de internet Tuenti, muy popular entre jóvenes adolescentes.
Los agentes le detuvieron hace dos días en su domicilio, aunque al parecer la violación se había producido hace meses, pero la joven, de 16 años, no le había contado nada a sus padres y no denunció la violación hasta el pasado 2 de noviembre, que es cuando se inicia la investigación.
La Benemérita tardó casi tres meses en identificar al hombre que había contactado con la chica a través de dicho portal de contactos en internet, que usan a diario miles de jóvenes para comunicarse entre sí y conocer a gente. El agresor contactó con la joven en Tuenti y más tarde empezó a comunicarse con ella a través del correo electrónico. El hombre se ganó la confianza de la chica y terminó sabiendo cosas privadas de su vida, cosas que supuestamente la comprometían. El acusado usó toda la información que la joven le había enviado en sus correos para chantajearla y así conseguir que se citara con él en persona. Quedaron, ella entró en su coche, él la llevó a una zona descampada y allí volvió a amenazarla con divulgar sus mensajes entre sus amigos y familiares, a no ser que accediera a tener sexo con él, según informó la Guardia Civil. En un momento determinado, ella llegó a oponerse a que él la tocara y el hombre le dio un bofetón.
Al final la Guardia Civil terminó por localizar al hombre, realizó un registro domiciliario en su vivienda y se le intervinieron dos equipos informáticos. El equipo de delitos tecnológicos del Instituto Armado analizará los datos de ambos ordenadores para determinar si hubo otras víctimas. Tras el registro, los agentes detuvieron al sospechoso, que fue conducido a los calabozos de la comandancia de Cádiz.
Malos tratos. Otra red social, Facebook, ha tenido protagonismo en un suceso mortal en Garrucha (Almería), donde una mujer ha fallecido tras arrojarse al vacío minutos antes de un juicio contra su ex pareja, acusada de malos tratos. El hombre se hallaba en prisión preventiva y debía salir para asistir a un juicio rápido. La mujer se arrojó al vacío desde una terraza antes de celebrarse la vista. El día anterior había colgado de su perfil de Facebook un mensaje titulado Last words (Ultimas palabras), donde contó que su ex pareja "la golpeó durante el tiempo que estuvo viviendo en su casa" y le dejó "un ojo morado y una brecha en la cabeza". En el mensaje se despide de sus dos hijos, maldice al supuesto agresor y adelanta que pasó sus últimas 12 horas "aterrada" y que durmió "con una palanca de hierro en sus manos, una botella al lado de la cama y el teléfono listo para marcar el número de la Guardia Civil".La mujer se llamada Lita B., tenía 45 años, era de nacionalidad británica y profesora de inglés de una academia, muy conocida en el municipio. La concejal de Seguridad Ciudadana de Garrucha, María de la Paz Bonet (PP), declaró a Europa Press que la mujer apareció a las 9.15 horas del viernes en la terraza de su edificio, amenazando con saltar. Cuando intentaron detenerla, cayó a la calle.
