Agentes del equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Carmona, en el marco de la operación Fuentes Veloz, detuvieron ayer a un individuo e imputaron a otros tres por estafa en la venta de vehículos, cuyo montante asciende a unos 300.000 euros, al vender turismos con los cuenta kilómetros manipulados para que presentaran una cantidad considerablemente menor de los que realmente tenían.
Los hechos se iniciaron cuando un Guardia Civil, perteneciente al equipo de Policía Judicial de Carmona y encontrándose fuera de servicio, escuchó una conversación en la que una persona instaba a otra rebajarle kilómetros a un vehículo. El agente, que intuyó que la información podía ser verdadera, investigó a esta persona, que resultó ser un empresario del sector de la automoción de la localidad sevillana de Fuentes de Andalucía.
Durante la investigación, se vieron implicados tres negocios de compra-venta de vehículos, situados todos ellos en las localidades de Fuentes de Andalucía, La Campana y Carmona. En las ventas que se revisaron y que correspondían al último año, se comprobó que se ha perjudicado a un centenar de personas. En las inspecciones efectuadas, se precintaron varios vehículos que se encontraban dispuestos para su venta y que presentaban irregularidades documentales además de cuenta kilómetros presuntamente manipulados.
En el concesionario del municipio de Fuentes de Andalucía, los vehículos se adquirían de manera legal a empresas de renting, con un kilometraje muy elevado y, por tanto, con un precio de compra menor de lo habitual debido a esta circunstancia.
A continuación, otra persona bajaba el kilometraje del vehículo entre 80.000 y 200.000 kilómetros, según el caso, por un importe que oscilaba entre 80 y 90 euros, revalorizando el mismo de 3.000 a 5.000 euros.
Tras esta intervención, los vehículos continuaban un canal de distribución, bien hacia otros concesionarios de compra-venta o a particulares. Sin embargo, en ningún momento se facilitaba a los destinatarios o intermediarios los kilómetros en las facturas, el libro de revisiones o tarjetas de inspección técnica donde figuraran más kilómetros de los que tuviesen una vez manipulados. Al propietario de este concesionario, identificado como F.C.J y al individuo que manipulaba los cuentakilómetros, que fue localizado y detenido en Córdoba, se les imputan sendos delitos de estafa.
Por su parte, en el concesionario de La Campana, se localizaron tres vehículos expuestos y manipulados, que fueron igualmente precintados, por lo que su propietario, que responde a las iniciales P.F.A. se encuentra también imputado por un delito de estafa. En Carmona se localizó un vehículo con irregularidad en el kilometraje expuesto en un concesionario de compra-venta, y se contactó con varios perjudicados que adquirieron vehículos, comprobándose rutinariamente que estaban manipulados, por lo que al propietario del mismo se le ha imputado, igualmente, por un delito de estafa.
Durante la investigación, según informó la Guardia Civil en una nota, los agentes que se encargan del caso, trabajaron constantemente contando con el apoyo de Fedeme (Federación de Empresarios del Metal) quienes trabajan «con una praxis legal, en la que tanto la trayectoria, condiciones del vehículo, factura y garantía tienen total transparencia documental hacia el usuario, y cooperan activamente en desenmascarar este tipo de empresarios sin escrúpulos que tanto daño generan a la imagen del sector».
En este sentido, las patronales del sector de los concesionarios, se mostraron «muy satisfechas por el resultado de la operación».
