Agentes de la Guardia Civil de las localidades sevillanas de Guillena y La Algaba han detenido a tres hermanos por cultivar marihuana y por un delito de desobediencia grave a los agentes de la autoridad.
La detención se ha producido a raíz de la información facilitada por una persona anónima que comunicó a los agentes sobre la existencia de una finca en Guillena con bastantes plantas de marihuana, informó a Efe el Instituto Armado.
Durante una inspección, la Guardia Civil comprobó desde una camino de libre acceso que por encima del vallado de la finca sobresalían las copas de varias plantas de marihuana, así como la existencia de la plantación formada por una treintena de plantas que estaban dotadas de un sistema de riego.
La Guardia Civil contactó con el propietario de la finca que se presentó con sus tres hijos, uno de los cuales reconoció ser el dueño de la plantación ilícita, junto con sus dos hermanos.
Los agentes solicitaron la entrega voluntaria de las plantas, pero lejos de acceder al requerimiento los sospechosos entraron en su finca e intentaron de manera apresurada deshacerse de las plantas.
Para ello, utilizaron una moto "quad", que salió en dirección al pantano del Gergal, cargada con plantas que acaban de arrancar, al tiempo que eran arrojadas por encima de la valla de la finca.
Ante el grave riesgo de destrucción de pruebas, los guardias entraron en la finca para proceder a las detenciones y organizar un dispositivo de búsqueda de las plantas, la mayoría de las cuales estaban arrancadas y tiradas en el suelo.
Las plantas estaban etiquetadas con la misma caligrafía y datos relativos a las mismas.
