Hablar de la Marvel actual es hacerlo sin remedio de un par de nombres: Joe Quesada y Brian Michael Bendis. El primero, un dibujante y guionista reconvertido a editor jefe de La Casa de las Ideas, ha sido el máximo impulsor de los cambios que la editorial ha sufrido en la última década, ya sean en el ámbito de nuevos sellos (y ahí está ese Universo Ultimate del que ya hemos hablado más de una vez para demostrarlo) o de giros radicales en ciertas colecciones que, en no pocas ocasiones, le ha granjeado las duras críticas del fandom (y en ese sentido, ninguno se puede comparar al que sufrió Spider-man con el One more day). El segundo, escritor de una trayectoria fulgurante en el mercado norteamericano, se dio a conocer con sus trabajos independientes (Torso, Jinx o Powers) antes de ser captado por La Casa de las Ideas y comenzar lo que ahora, tras algo más de un lustro, se ve claramente como una remodelación en toda regla de las estructuras básicas del Universo Marvel.
Así, si damos un rápido repaso a lo que Bendis ha ido elaborando a lo largo de estos últimos años, nos encontraríamos con el Vengadores desunidos, primer paso en la restructuración que derivaba en la creación de los Nuevos vengadores; esa Civil War (en la que Mark Millar también tenía mucho que decir) que trastocaba de forma radical el statu quo de la mayor parte de los héroes de la editorial; Invasión secreta o cómo darle la vuelta a décadas de continuidad sin que resulte extraño el que, a continuación, en la etapa conocida como Reinado oscuro, los malos (representados por Norman Osborn, el antiguo Duende Verde) dominen los destinos del mundo; y, por fin, el Asedio que este mismo mes comienza a publicar Panini.
Inmenso crossover planteado a través de las colecciones más importantes del Universo Marvel, Asedio es quizás el mejor y más claro ejemplo de lo que Bendis y cía. han venido haciendo en la Marvel actual: perfectamente planteado y ejecutado de forma brillante, la acción del evento, que se plantea como ruptura y vuelta a la "luz" de los héroes de la editorial, se desarrolla a través de dos miniseries de cuatro números (la propia Asedio y la titulada Infiltrados) y ramificaciones en las tres colecciones de Los vengadores, así como en otras como los Thunderbolts, Lobezno oscuro o Thor, completándose con varios números unitarios.
Y todo ello con una claridad tremenda que permite (algo raro en estos grandes crossovers) leer, si así se quiere, la miniserie central sin necesidad de tener que comprar todo lo demás. Un gesto que se agradece y que habla por sí solo acerca del gran trabajo que Marvel está llevando a cabo.
