Nació en Sevilla en 1925 como Juana Reina Castrillo y murió el 19 de marzo de 1999, también en la capital hispalense, como Juanita Reina, grande de la copla, el cuplé y la tonadilla, que inmortalizó piezas creadas para ella por León, Quintero y Quiroga como Francisco Alegre o Callejuela sin salía. Coincidiendo con el décimo aniversario de su fallecimiento, su viudo, el bailaor Federico Casado Algrenti Caracolillo entrega hoy a la Virgen Macarena en su basílica el Lazo de Dama de la Orden de Isabel la Católica, que recibió en 1961, según ha adelantado a Efe su biógrafa, la filóloga María Jesús Pérez Ortiz. Juana Reina era gran devota de la Virgen de la Macarena, de cuya cofradía fue hermana, además de camarera de la imagen, en cuyo pecho lucirá esta Semana Santa la ofrenda de la cantante, junto a las esmeraldas donadas por el torero Joselito, asegura María Jesús Ortiz, autora del libro Juanita Reina. Un estilo, una época.
Juana Reina era "una mujer sencilla, cercana y próxima en el día a día" y "una diva en el escenario". "Era una amante del hogar y de su casa; adoraba la naturaleza, las flores y el mar, y la música era su pasión", reconoce la escritora al hablar de esta mujer, que comenzó a cantar siendo niña y formó parte del espectáculo Tabaco y oro, gracias a su padre, Miguel Reina, empresario y promotor artístico, y del también empresario Enrique El Cojo. Llegó a ser llamada Emperatriz del cuplé, del pasodoble y la tonadilla, y según María Jesús Pérez, "no sólo era una cantante, sino una verdadera actriz dramática, gracias, además de a su voz, a su ademán y sus dotes expresivas, y a ese duende que tenía en las manos, pies y labios".
"Con una personalidad y un estilo irrepetibles, y una voz muy peculiar y muy lírica de contralto", alcanzó grandes éxitos con los clásicos compositores de copla española Quintero, León y Quiroga, así como con el maestro Naranjo, que compuso para ella, La niña blanca y Los churumbeles. Para el cine, fue Florian Rey fue quien la descubrió y le ofreció el papel de protagonista en la cinta Blanca Paloma, de 1942. Posteriormente, rodó Canelita en rama (1943); Macarena (1944), La Lola se va a los puertos (1947), de Juan de Orduña, Lola la Piconera (1951), de Luis Lucia, entre otras muchas.
Además del Lazo de la Orden de Isabel La Católica, que le impuso el Marqués de Valdivia en 1961, Juanita Reina estaba en posesión de la Medalla de Oro de Bellas Artes, la Medalla de Plata del Mérito en el Trabajo y la Medalla de Oro de Andalucía.
Su biógrafa, profesora de la Universidad de Málaga, asegura que de Juana Reina, una de las principales protagonistas de la exposición La copla en la Biblioteca Nacional, han bebido otras artistas como Rocío Jurado o Isabel Pantoja, pero "ella no tiene quien la reemplace". María Jesús Ortiz prepara el libro Poemas para Juanita Reina, que, con prólogo del periodista Carlos Herrera, reúne el poemario dedicado a ella por autores como José María Pemán, Luca de Tena o Marañón.
