Las tensas relaciones que desencadenaron el relevo al frente de la gerencia del Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha ocasionado un efecto dominó que ha tocado de lleno a los hospitales sevillanos. Francisco Torrubia, gerente de los centros Virgen del Rocío y Virgen Macarena, se adelantó a la reorganización impulsada por la consejera del ramo, María Jesús Sánchez Rubio, e hizo pública su renuncia a su cargo, un gesto que realizó por coherencia y la necesidad de generar un equipo para un proyecto de envergadura como es la gestión de los dos hospitales sevillanos. La renuncia, en cambio, no fue oficializada por la Consejería de Salud, que no obstante ya estaba preparando una reestructuración de todas las áreas.
No tengo esa constancia, pero puede ser, indicó Sánchez Rubio, desde Córdoba, donde incidió en que esa nueva etapa arrancará el martes con la aprobación, en el Consejo de Gobierno, del cese de José Luis Gutiérrez y la incorporación en este cargo del actual director gerente del Hospital Universitario Reina Sofía, José Manuel Aranda. Él asumirá, como gerente del SAS, el nombramiento de los nuevos equipos directivos.
En esa quiniela no entraba, en un principio, la continuidad de Torrubia, que asumió la gerencia del Hospital Virgen del Rocío por petición expresa del exgerente, allá por el mes de septiembre de 2009. Además, fue una de las piezas en el complejo proceso de reordena- ción del SAS, impulsado por Gutiérrez a finales de 2012 y que implicó, entre otras cuestiones, la fusión de la gestión de los hospitales Virgen del Rocío y Macarena.
Torrubia no esperó a que se pudiera anunciar el relevo y decidió oficializar su marcha. Lo hizo en los micrófonos de la Cadena SER, donde creía coherente facilitar que se pueda generar otro nuevo equipo con la complicidad necesaria para poder dirigir esta empresa, además en los momentos de cambio, y con proyectos de envergadura y calado como los que estamos ahora gestionando.
Torrubia, (Villaviciosa, Córdoba, 1959), doctor en Medicina y Cirugía por la Universidad de Sevilla, ocupa desde 2012 la gerencia de ambos hospitales. Desempeñó el cargo de director médico en el Virgen del Rocío de 2003 a 2009, momento en el que se le brindó la oportunidad de ser el director gerente del hospital y sustituir a Joseba Barroeta, que fue relevado tras once años en el cargo.
Mientras, se suceden las reacciones sobre la abrupta dimisión del gerente del SAS, que se adelantó a su cese anunciado para el martes. Los sindicatos, caso de Satse o CCOO, coinciden en que la marcha de Gutiérrrez es una oportunidad para el cambio de rumbo y romper con una etapa en la que no existía talante negociador. Desde el Sindicato Médico, de su parte, se le exigió a su sustituto un cambio radical en la gestión desde el punto de vista profesional. De su parte, la consejera defendió a su relevo, José Manuel Aranda, del que destacó no sólo sus siete años al frente del Reina Sofía, sino que conoce todos los aspectos de la gestión sanitaria. A su vez, restó importancia al cese de Gutiérrez: Los únicos imprescindibles son los 95.000 profesionales del SAS.
