El PSOE y el PP hicieron ayer públicas las declaraciones de la renta de todos sus diputados, los 56 socialistas y los 47 populares. Izquierda Unida se les adelantó y hace unos días publicó las de sus seis parlamentarios. Los partidos andaluces han empujado el epicentro del debate político hasta este punto: ¿quién cobra más, los socialistas o los populares, el presidente de la Junta o el líder de la oposición? ¿Quién demuestra más austeridad en época de crisis? ¿Quién es más transparente con sus cuentas? Todo este asunto empezó con un discurso del presidente, José Antonio Griñán, en el que reivindicaba la honorabilidad de los políticos, de todos. Pretendía enarbolar el prestigio de su oficio frente a la desafección que causan en la calle, buscaba combatir la simplicidad de quien denuncia que todos los políticos son iguales, que cobran demasiado para lo poco que hacen, que predican desde una urna de cristal ajenos a la gravedad de la crisis y del desempleo.
Eso fue lo que inspiró el debate. Pero, tras dos semanas de rifirafes, ha vuelto al principio -¿quién cobra más, la izquierda o la derecha?- y ha culminado con la dialéctica más simplista que uno pueda imaginar: lo que cobran los políticos, al margen de en qué trabajen, cómo trabajen, qué piensen, cómo defiendan sus ideas..
Llegados a este punto, lo oportuno es comparar salarios: entre los socialistas están los diputados que más cobran y los que menos cobran, con la salvedad de Arenas. Los sueldos más elevados en el PSOE son los de Antonio Núñez (122.846 euros), que no cobra como diputado, sino como jefe de Inmunología del Hospital Virgen del Rocío, y el de el consejero de Turismo, Luciano Alonso (103.071 euros), aunque el PSOE matiza que en su borrador están incluidos los ingresos de su mujer, que es profesora. Los sueldos más altos en el PP son los del alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez (95.395 euros) y el de la portavoz Esperanza Oña (86.923 euros).
Los sueldos más bajos en el PSOE son los de dos diputados novatos que ingresaron en la Cámara tras las municipales: Manuel Carmona (6.914 euros) e Isamael Vaca (3.354 euros). Los que menos cobran en el PP son Miguel Ángel Ruiz (13.796 euros) e Isabel Cabezas (18.875 euros). Por franjas de ingresos, con más de 90.000 euros al año hay tres socialistas y dos populares. Entre 80.000 y 90.000 euros, hay cinco del PSOE -dos consejeros y la presidenta del Parlamento, Fuensanta Coves (83.972 euros). Entre la franja de los 70.000 y 80.000 euros, se encuentran nueve socialistas -cinco consejeros y un exconsejero- y cuatro populares.
En la horquilla de los 60.000 a los 70.000 euros hay diez diputados socialistas, entre ellos el portavoz parlamentario, Mario Jiménez, y 14 populares, como el número dos, Antonio Sanz, o los alcaldes de Córdoba y Jaén. La mayoría de los salarios del PSOE y del PP se sitúan en la horquilla de los 50.000 a los 60.000 euros: 26 socialistas y 15 populares. Por debajo de 50.000, el PSOE sólo tiene testimonialmente a los dos diputados nuevos, mientras que el PP cuenta con 11 parlamentarios.
Entre los diputados de IU, el que más cobra es Ignacio García (74.555 euros), seguido del coordinador regional, Diego Valderas (68.996 euros). El que menos ingresa es Antonio Castro Román (53.848 euros). Los ingresos de los diputados que más se parecen son aquellos que sólo cobran de la Cámara. Formar parte de una comisión o de la mesa del Parlamento supone un plus en el salario base del diputado que es de 3.000 euros al mes.
