La cuadra Río Cubas dobló victoria con los dos caballos que presentó, Doende y Sandulces, que, rompiendo los pronósticos, se impusieron de forma respectiva en el Gran Premio Ciudad de Dos Hermanas, una de las pruebas estelares del calendario, y en el Premio Cruzcampo, primera manga del hándicap.
A las primeras de cambio, y pese a la durísima competencia que ofrecía el lote de veinte unidades que tomó la salida en los 1.800 metros del gran premio reservado para caballos y yeguas de origen español, cuadra y preparador vieron recompensado su esfuerzo con un triunfo de postín y con los 25.500 euros que había reservados para el ganador.
Nada más darse la largada, Doende, dirigido magistralmente por Borja Fayos, aprovechó el hecho de salir por el cajón número 1 para colocarse en cabeza del pelotón y, así, evitar los problemas de tráfico que aparecerían en el corazón del grupo con tantos participantes en liza.
Una vez asegurada una buena ubicación, el cuatro años de Río Cubas, ya ganador en Dos Hermanas el invierno pasado y que volvía a la pista sevillana después de acumular en lo que va de 2010 un excepcional registro de dos triunfos y cinco colocaciones, cedió la punta a Ilusionista.
Éste, como siempre le ha gustado, tiró con ímpetu, imprimiendo un buen paso, mientras los grandes favoritos, Suntuoso, Atlántico y Volapie, galopaban cómodamente en la tercera línea del pelotón.
Llegado el derecho, se desató la batalla: Ilusionista se hizo fuerte pegado a palos y aguantó la primera embestida de Doende por el segundo carril mientras Camuray seguía sin perder comba; Atlántico se vino abajo, Volapie aguardaba su momento por dentro y Suntuoso, por el exterior, encontraba el camino libre.
A doscientos metros para la herradura de meta, Doende rebasó a Ilusionista, y Suntuoso protagonizó un interesantísimo acelerón que sin embargo resultó insuficiente ante la maestría de Fayos.
Igualmente inesperado fue el triunfo del otro Río Cubas, Sandulces, que con la jockette Claudine Cazalis en su lomo, se impuso por una nariz a Arathorn (fue necesario recurrir a la foto-finish) en la llegada más bonita de la primera jornada.
Más sorpresas
En la segunda parte del hándicap, Premio Coca Cola, también hubo sorpresa, pues la victoria correspondió a Gioconda, que, con unos livianos 50 kilos, lideró de punta a punta con la monta del prometedor aprendiz Jorge Manuel Sánchez Cuevas, quien sostuvo en lo más alto a la yegua de la cuadra Las Águilas pese al ataque de Covelo, que portaba 12 kilos más. Si la diferencia de pesos de uno y otro no hubiera sido tan amplia, seguramente el desenlace habría sido otro. El trío de esta carrera lo completó Olina.
La jornada se abrió con el Premio Ameral, un kilómetro casi rectilíneo para potros y potrancas de dos años no ganadores. Pichuca, que ya había dejado detalles en Madrid, se llevó el triunfo, dejando a más de tres cuerpos de ventaja a quienes, en teoría, estaban llamados a pelear la carrera: Chief Key, Barking, que pasó desapercibido en su estreno español, y Prisca Vivaz.
En la prueba reservada para tres años no ganadores, Premio Cajasol (1.500 metros), se vio el único triunfo de un favorito: ganó, y con mucha suficiencia, Royal Imari, dando por fin el nivel que se esperaba de un potro por el que se pagaron más de 90.000 euros. Patricio y El Africano cerraron el trío.
