Al menos 16 personas murieron ayer y otras 44 resultaron heridas por la explosión de dos coches-bomba en una estación de autobuses ubicada en el suroeste de Bagdad, según informaron fuentes policiales iraquíes.
Según las fuentes, que anteriormente había señalado que las víctimas eran cinco muertos y 20 heridos, los vehículos estallaron de forma consecutiva en el interior de la estación, situada en el barrio de Al Baiá. Las fuentes no descartaron que el número de damnificados pueda aumentar, debido a la gravedad de algunos de los heridos.
Además, 10 coches próximos al lugar de la explosión, resultaron ardiendo, apuntaron que las fuentes, que agregaron que tras el ataque la Policía cercó el área. El atentado coincidió con varios ataques en otras zonas del país que se cobraron tres vidas.
