Dos empleados de la gasolinera de la Ronda de Capuchinos resultaron ayer heridos como consecuencia de un atraco perpetrado por dos jóvenes a mediodía y a punta de pistola. Los ladrones se llevaron la recaudación de la caja y huyeron en una moto.
A las 13.00 horas de la mañana de ayer la concurrida gasolinera de la Ronda de Capuchinos atendía a los clientes con total normalidad. Sólo hasta ese momento, porque pasados unos minutos un joven entró en la tienda y, amenazando con una pistola al empleado que cobraba, se llevó el dinero de la caja registradora.
Éste es el escueto relato que hacía horas después uno de sus compañeros, que aclaraba que ninguno de los dos empleados que se vieron involucrados en el atraco resultó herido de gravedad. Tan sólo sufrieron un ataque de nervios del que fueron atendidos en el hospital Macarena, el más cercano al lugar de los hechos, explicó.
Sin embargo, fuentes del Servicio de Emergencias del 112, que dieron aviso de la noticia, apuntaron que los trabajadores recibieron golpes en la cabeza con la pistola de los que fueron atendidos en el centro hospitalario.
Sobre las 13.00 horas de ayer, un joven -del que las fuentes consultadas no supieron precisar si iba o no encapuchado- entró en la tienda de la gasolinera apuntando con una pistola y reclamando el dinero de la caja. Los empleados interrogados más tarde por este periódico no supieron cuantificar lo sustraído. "Hay domingos más fuertes que otros", se limitaron a decir.
En realidad no tenían, o no querían, desvelar muchos más datos sobre lo ocurrido. "Los chavales -por los compañeros que resultaron heridos- fueron al hospital y volvieron poco después para recoger sus cosas. No nos han contado mucho, porque hacía tiempo que debían estar en casa y temían que la radio o la tele contaran lo del atraco y lo escucharan sus familias", explicaron.
Lo que sí reconocía uno de ellos es que fueron dos las personas que atracaron la gasolinera: uno fue el que entró en la tienda mientras otro lo esperaba fuera en una motocicleta. En ella fue en la que huyeron a toda prisa.
"Llevo 24 años trabajando en esta gasolinera y no recuerdo un robo así", hacía memoria uno de los empleados del turno de tarde. El robo fue rápido. Compañeros de los heridos -atendiendo en el túnel de lavado y en los surtidores- ni siquiera se percataron de lo que estaba sucediendo.
Al lugar de los hechos se desplazaron los servicios de emergencias del 061 y agentes de la Policía Local, informaron desde el servicio de emergencias 112. Al cierre de esta edición aún no se sabía si los atracadores habían sido o no detenidos, ni se facilitaron más datos del incidente, como, por ejemplo, si el robo ha quedado registrado en las cámaras de seguridad de la gasolinera.
Por la tarde, la actividad en la gasolinera era absolutamente normal. Ni rastro del incidente. Ni tampoco de policías. Tan sólo un patrullero se paró en torno a las 16.30 horas, pero lo hizo para repostar. La Feria y los toros absorben estos días a la mayor parte de los efectivos de seguridad.