Local

Dos tuneladoras acelerarán en 15 meses la construcción de la SE-40

Lo anunció la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, en su última visita a las obras de la SE-40: se tardará cuatro años en hacer el túnel bajo el Guadalquivir. El plazo supone una reducción de 15 meses sobre la fecha inicial gracias a que trabajarán dos tuneladoras y no una como estaba previsto.

el 16 sep 2009 / 00:22 h.

TAGS:

Lo anunció la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, en su última visita a las obras de la SE-40: se tardará cuatro años en hacer el túnel bajo el Guadalquivir. El plazo supone una reducción de 15 meses sobre la fecha inicial gracias a que trabajarán dos tuneladoras y no una como estaba previsto.

Hay que aligerar plazos, lo que no es fácil si recordamos que estamos ante una obra de una envergadura pocas veces vista por estos lares: cuatro túneles (dos en cada sentido) con dos carriles cada uno y a casi 40 metros de profundidad bajo el Guadalquivir. La solución al final ha sido tan sencilla como dividir en dos el proyecto, de tal manera que se adjudicarán por un lado los túneles norte (los más cercanos a Sevilla) y por otro los del sur.

Esto permitirá que las obras se acometan a la vez en los dos tramos gracias a que trabajarán dos tuneladoras en vez de una, que es lo que habría ocurrido de ser un único proyecto tal y como estaba planteado inicialmente. De la envergadura de lo que se va a hacer en este tramo de la SE-40 dan una pista los presupuestos de licitación: 245,5 millones de euros para los túneles sur y 232,7 para los del norte, es decir, que hablamos en total de 478,2 millones. A esto hay que sumar una tercera obra de 83,7 millones para dotar de instalaciones el interior de los túneles.

Los técnicos del Ministerio de Fomento calculan que con las dos tuneladoras podrán acortarse los plazos en 15 meses, lo que no es poco teniendo en cuenta que en hacer cada pareja de túneles se invertirán 50 meses, tal y como establece el proyecto de licitación. Dicho de otra manera, que si se hubiese mantenido la idea original de un solo proyecto nos habríamos ido a los 65 meses de trabajos, casi cinco años y medio.

Pese a que se ha dividido en dos la obra hay tiempos que no se pueden acortar, como es el de la fabricación de las tuneladoras y su puesta en marcha, que estará en unos 20 meses. Y es que hablamos de unas tuneladoras tan específicas que, como es habitual en estos casos, habrá que fabricarlas expresamente para horadar bajo el Guadalquivir. "Es difícil encajar las características concretas de una máquina construida para una obra con las necesidades para otra diferente", explican desde Fomento.

Esto es precisamente lo que ocurre en este caso, en el que los diámetros proyectados "no se adecuan a ninguna de las tuneladoras existentes" en España, lo que aboca al diseño a la carta. Por cierto, que la tarea no es fácil porque es necesario tal nivel de especialización que en todo el mundo sólo se le puede encargar la fabricación a tres o cuatro empresas muy concretas, ninguna de ellas por cierto española.

De escudo. Lo que también tienen claro los técnicos es que, al tratarse de una obra en la que hay agua de por medio, tendrá que ser una tuneladora de escudo de presión de tierras (EPB) al ser las mejor indicadas para los suelos en los que se va a trabajar, las margas habituales del Guadalquivir, además de estratos de arenas y gravas. Las máquinas de este tipo, con las que también se hizo la parte subterránea del Metro, son las que se mueven sobre raíles que se van poniendo conforme avanza, a la vez que coloca las dovelas de hormigón que soportan el túnel.

  • 1