El Ministerio de Educación pretende prorrogar dos años más el modelo de jubilación voluntaria anticipada que permite a los profesores retirarse a los 60 años -y no a los 65- con el 100% de su pensión y un incentivo económico. La llamada jubilación LOE, a la que se han acogido 9.966 profesores andaluces en los últimos cinco años, expira en agosto. La semana que viene se cierra el último plazo para acogerse, lo que está provocando un aluvión de solicitudes. Entre 1.500 y 2.000 maestros andaluces se jubilarán este curso, según estimaciones de la Consejería de Educación.
En una entrevista a El Correo que se publicará mañana, el secretario de Estado de Educación y número dos del ministerio, Mario Bedera, ha anunciado su intención de prorrogar dos años más la jubilación LOE, una demanda que llevan meses haciendo las federaciones de enseñanza de todos los sindicatos y las comunidades autónomas, sobre todo Andalucía, donde más del 40% del profesorado ronda los 60 años. La jubilación voluntaria ha permitido rejuvenecer más del 10% de la plantilla andaluza, y no sólo en términos de edad. También se han incorporado docentes jóvenes con un nivel formativo más adaptado a las nuevas demandas del sistema, como el bilingüismo y las nuevas tecnologías, "programas esenciales que no estaban suficientemente cubiertos con la plantilla que accedió al sistema hace 40 años", explica el consejero de Educación, Francisco Álvarez de la Chica. Otra razón, más tangible, es que al sustituir a los veteranos con nuevos docentes, la administración ahorra bastante dinero.
Al ser preguntado si el ministerio planea prorrogar la jubilación LOE, el secretario de Estado de Educación despeja al fin las dudas: "Sí, lo vamos a pedir. El Ministerio de Educación no es ajeno al contexto económico del país, no somos una burbuja. Se acaba de aprobar un gran pacto social que reforma las pensiones y posterga la edad de jubilación a los 67 años, pero no se pondrá en marcha hasta el 1 de enero de 2013. Nosotros decimos que, hasta entonces, prorróguese la jubilación LOE, y entretanto discutiremos cuál será el sistema de jubilación para nuestros docentes en el futuro y si esta profesión es lo suficientemente relevante como para ser tratada de forma excepcional. Esto es de hace cuatro días. Estamos en contacto con el ministerio de Trabajo y con el resto del Gobierno para sacarlo adelante, pero aún falta que lo apoyen los sindicatos".
El sector de la enseñanza de CCOO y UGT ya lo ha manifestado abiertamente, pero Bedera afirma que esta decisión "depende de las confederaciones, de Cándido Méndez y de Ignacio Fernández Toxo, fundamentalmente". "Queremos que se manifestasen públicamente a favor, porque esto debería cerrarse antes de septiembre. Creer que la jubilación del profesor beneficia sólo a una persona es una forma miope de verlo. Estamos hablando de rejuvenecer la profesión docente y de eso depende la implantación de grandes apuestas sociales, como el bilingüismo y las TIC. La jubilacicón anticipada del maestro es casi una cuestión de Estado", explica.
Respaldo andaluz. Recientemente, Álvarez de la Chica también se mostró a favor de una prórroga en la jubilación LOE y rechazó el retraso de la edad de jubilación a los 67 años para el colectivo docente. "Yo soy partidario de la jubilación anticipada en los términos en los que está. Lejos de ser un privilegio individual, beneficia al conjunto del sistema. De la misma manera que la gente entiende que con 70 años se puede seguir dando clases en la Universidad, la sociedad debe entender que a partir de 60 y pocos años, tener una clase de niños pequeños puede convertirse en algo muy difícil".
La jubilación LOE está recogida en el Acuerdo Básico de 20 de octubre de 2005 suscrito por el ministerio con CCOO, ANPE, UGT y CSIF. Es un derecho al que pueden acogerse todos los profesores de 60 a 64 años que llevan 15 años ininterrumpidos de servicio en una escuela pública. Conservarían el 100% de su pensión de jubilación -como si hubieran apurado hasta los 65- y una gratificación económica que depende del número de años trabajados y de la edad y categoría que tengan cuando decidan retirarse. En Andalucía, esa cifra oscila entre 6.000 y 30.000 euros, a medias entre Gobierno y la Junta. La pensión máxima en educación está fijada en 35 años en Primaria y 32 en SEcundaria.
