El entrenador del Sevilla, Unai Emery, lamentó la derrota en La Rosaleda porque era una muy buena oportunidad para romper la racha de tres partidos sin ganar que acumulaba el Sevilla, y que ahora asciende a cuatro encuentros: «Hoy teníamos una buena oportunidad para romper la racha y no la hemos aprovechado. Hemos estado en un porcentaje alto del partido por debajo de ellos. En el primer tiempo, aunque no han tenido ocasiones claras, no producíamos juego para irnos hacia delante. No hemos tenido situaciones cercanas a la portería, y aunque puntualmente hubo ocasiones buenas como la de Reyes, en general no estábamos a gusto». Esto se debe, según las explicaciones del ténico sevillista, a que el Málaga se jugaba mucho más que el Sevilla en el partido: «No teníamos el control del juego ni del balón, y ellos quizás por lo que se jugaban pusieron un puntito más que no pudimos igualar. En el segundo tiempo tuvimos 20 minutos en el que conseguimos más control, presencia en campo contrario y dos goles. El 1-2 nos daba comodidad para encauzar el partido pero con el empuje de ellos ya fuimos incapaces. Más allá de que sea justo o injusto, hemos perdido una gran oportunidad y estamos tristes», aseguró. Tras esta derrota, el objetivo de lograr una plaza europea vuelve a estar en el aire tras haber logrado una gran remontada en las últimas ocho jornada:«Es otro freno más. El sábado pasado fue de una forma y hoy de otra. Llegamos al séptimo puesto y queríamos algo más, y tenemos que asentar esa posición para, a partir de ahí, acercarnos. Nos hemos parado y hay que remontarlo. Se irán acercando los rivales pero hay que dar luego el siguiente paso. Cuando estábamos más cerca nos hemos parado», finalizó.