La razón principal que esgrime la Consejería de Igualdad para la retirada de un menor a sus padres es que la mayoría, 7 de cada 10, ha sufrido malos tratos en casa. La Junta tiene más de 6.000 niños tutelados, 4.300 acogidos por familias voluntarias y 2.000 en centros de menores. Micaela Navarro pidió ayer la ayuda de más familias para esos 2.000 críos.
La semana pasada, en Torremolinos (Málaga), una chica de 20 años salió de copas y dejó a su hijo de dos años solo en casa. Los vecinos oyeron llorar al crío a las dos de la madrugada y llamaron a la Policía. Los agentes entraron por la fuerza en el domicilio, y esperaron a la madre, que apareció a las seis de la mañana. La chica fue detenida y la Consejería de Igualdad decretó un desamparo provisional y le retiró el niño a su madre. El 95% de las retiradas de menores vienen ratificadas por un juez.
"¿Qué hacemos en este caso?", se preguntó ayer la consejera Micaela Navarro, "la madre dijo que era la primera vez que lo hacía. ¿Lo dejamos pasar? ¿Y si le hubiera pasado algo al niño?". Navarro dijo que este caso es más común de lo que se cree. Quiso recordarlo para explicar que su departamento no sólo retira los hijos a familias sin recursos o con riesgo de exclusión social. "Eso es un cliché falso. Se retira a un niño por falta de atención, de cariño y de coberturas básicas, pero no por falta de dinero".
La consejera presentó ayer el primer informe sobre acogimiento familiar en Andalucía que fue encargado a la Universidad de Sevilla. La investigación, en la que participaron 218 menores y sus familias de acogida, ha desvelado que la mayor parte de los más de 6.000 menores retirados en la comunidad fueron víctimas de los malos tratos a manos de sus padres (72,5%) antes de entrar en el programa de acogimiento.
El año pasado, unos 4.300 menores fueron acogidos por familias voluntarias. El 85% eran los abuelos de los niños, los tíos, cualquier familiar cercano que se hizo cargo de ellos mientras los técnicos de Igualdad valoraban la evolución de sus padres, y decidían si estaban ya en condiciones de recuperar la tutela de los hijos. El 37% de los menores retirados son acogidos antes de cumplir un año de edad, por tanto nunca han pasado por un centro de menores.
Igualdad tiene dos programas para proteger a niños en desamparo: las familias de acogida y los centros de protección. La Junta se inclina abiertamente por el primero, por ser más "beneficioso para el niño", de ahí que Navarro hiciera ayer un llamamiento para lograr que más gente se ofrezca a ser familia de acogida, y así sacar a esos 2.000 niños de los centro de menores y llevarlos a un hogar.
Casi todas las familias que acogen a un niño lo hacen de forma altruista. Algunas ya han cuidado a 18 críos. Más de 1.200, en cambio, tuvieron que recibir una remuneración para poder acoger a 1.700 menores en 2008 (47% del total). La Junta ha pasado de remunerar al 25% a hacerlo con el 50%. Ahora entrega 250 euros al mes por un menor acogido.
