El acusado de matar y descuartizar a la profesora norteamericana Laura Cerna Baird y tirar su cuerpo al río en una maleta seguirá en prisión, después de que el juzgado le imputase ayer el homicidio doloso, un delito de profanación de cadáveres y también violación, a petición del abogado de los padres de la víctima. A falta de los resultados definitivos de la autopsia, los padres se han basado en que el cuerpo estaba totamente desnudo para considerar que pudo haber abuso sexual.
La defensa del acusado, Antonio Gordillo, había pedido la semana pasada su libertad ya que el hombre admite haber descuartizado a la mujer pero niega haberla matado, y asegura que ella misma se acuchilló. Sin embargo, el juez de Instrucción 18 desestimó ayer la petición sin ni siquiera consultar al resto de las partes. Los resultados preliminares de la autopsia ya revelaron una cuchillada tan fuerte en el esternón que difícilmente podría habérsela causado la víctima.
La comparecencia se realizó en presencia del acusado, a quienes aguardaron a las puertas de los juzgados la familia de la víctima y un grupo de curiosos que profirió gritos de "¡asesino!" a su paso. El detenido recorrió los dos edificios judiciales escoltado por la Policía y cubierto con una sudadera que llevaba anudada a la cabeza para impedir que se le viera la cara. La madre de la víctima, que se desmoronó al verlo, llevaba fotos de su hija a gran tamaño que no pudo mostrarle.
La madre de la víctima, la abogada norteamericana Sandra Cerna, había leído poco antes un texto, que forma parte de las actuaciones, que el detenido pidió escribir mientras la Policía registraba su casa. En él admitía haber cortado la cabeza y el cráneo a la mujer porque no podía cerrar la maleta en la que lo arrojó al río Guadalquivir, mostrándose arrepentido y pidiendo perdón por el daño causado, "de una forma un tanto excesiva si se tiene en cuenta que niega el crimen y sólo se refiere a haberse deshecho del cadáver", indicaron fuentes del caso. La madre de la víctima dijo ayer indignada: "¿Perdón? ¿Cómo puede ser eso? Yo no he venido por venganza, pero quiero justicia para mi hija y contra él", tras lo que pidió a los sevillanos su apoyo para que el acusado sea condenado "a la máxima pena que prevé la ley española" en el juicio con jurado.
La defensa ha pedido informes psiquiátricos y de toxicología del acusado ya que alega que era consumidor habitual de drogas.
