A modo de una lista de pros y contras, AENA ha identificado en un plan de marketing las fortalezas y debilidades del aeropuerto de San Pablo para intentar poner fin a la sangría de pasajeros que sufre desde 2011, al pasar de casi 5 millones anuales a 3,6. Entre los pros están la capacidad de sus infraestructuras, sus costes por debajo de la media europea, el tirón de la imagen de marca de Sevilla y una situación geográfica a menos de 150 kilómetros de la costa y a medio camino entre Centroeuropa y Canarias o el Norte de África. Entre los contras destacan el elevado peso de las low cost (con excesiva dependencia de Ryanair), la competencia del AVE en la conexión con Madrid y con el aeródromo de Faro para atraer al turismo de la costa onubense, y una actividad muy influenciada por la situación económica ya que más del 60% de su tráfico es nacional. Con este diagnóstico, la apuesta de AENA pasa por lograr vuelos directos con 12 destinos europeos prioritarios, adelantar el primer vuelo a Madrid (con ofertas de parking y precio para competir con el AVE) para poder enlazar con las rutas a América y Asia desde Barajas y hacer de Sevilla un hub por el que apuesten como escala las compañías que vuelan desde Centroeuropa a Canarias o destinos turísticos norteafricanos. El plan apuesta por convencer a compañías centroeuropeos de que en vez de vuelos directos de cinco horas, hagan escala en Sevilla, por lo que captarían así a viajeros interesados en Canarias, Marruecos o Cabo Verde pero también en la costa de Huelva, Cádiz o el Algarve a donde desde Sevilla es fácil llegar por carretera. Su hueco lo cubrirían quienes desde Sevilla quieran ir a las islas o el Norte de África.
- Hasta ahora el 70% del tráfico era nacional pero crece el internacional. / Javier Díaz