No era el primer comportamiento agresivo ni tampoco algo novedoso para él. José Antonio G.R., el joven de 28 años que agredió brutalmente a una niña de 13 años en Utrera, ya tenía antecedentes policiales previos por haber protagonizado otros actos de maltrato familiar y lesiones. Así lo confirmaron a este periódico fuentes de la Guardia Civil, que explicaron el origen de las dos detenciones anteriores. En este sentido, hace unos dos años, este individuo fue detenido por un delito de lesiones. Ya más reciente, hace un año aproximadamente, volvió a ser detenido, en esta ocasión por supuestos malos tratos en el ámbito familiar, aunque sin precisar si dicha actuación estaba relacionada con violencia de género.
Por su parte, relacionado con este caso, la Benemérita aclaró que el presunto agresor, natural de Málaga , no disponía de ninguna orden de alejamiento con respecto a la niña. Por ello, la Policía Local no pudo proceder a su detención en la noche del pasado sábado, cuando la abuela de la menor alertó a los agentes de la presencia del individuo, que merodeaba por el entorno de la vivienda, en la barriada Los Salesianos.
En cuanto al paradero del malagueño, fuentes del Instituto Armado reconocieron que sigue sin estar localizado. Para dar con su situación, han sido alertados los cuerpos policiales, a quienes se les han facilitado imágenes de José Antonio, con la intención de que sea más fácil reconocerlo y detenerlo. Se trata de un varón, de gran estatura, pelo largo recogido en una coleta y que viste al estilo gótico, con botas y ropa de color negro. El día de la agresión también llevaba unas gafas de sol, que perdió en su huida del lugar de los hechos, y que recogió la propia Guardia Civil.
Sobre la evolución de la niña y de su abuela de 75 años, que igualmente recibió los golpes del joven, ambas siguen en el área de traumatología del sevillano Virgen del Rocío. En el caso de la menor, que está ingresada en la unidad de cuidados intensivos (UCI), se encuentra en estado de coma inducido, estable dentro de la gravedad, a la espera de comprobar cómo reacciona. Mientras, la abuela ya está en planta tras sufrir fracturas en ambas muñecas: la derecha la tiene escayolada, y la izquierda ha de ser operada.
El terrible suceso tuvo lugar en la mañana del domingo, cuando la niña salió de su domicilio, en un piso de la calle El Coronil. Fue entonces cuando el joven la golpeó insistentemente con una piedra que, al parecer, encontró en el mismo lugar de los hechos. Y es que, según algunos testigos, el joven portaba un destornillador que, quizás por los nervios, se le cayó al suelo, siendo este elemento recogido por agentes de la Policía Local cuando llegaron a la zona. Al comprobar lo que estaba ocurriendo, la abuela intentó parar al agresor, recibiendo ella también varios golpes.
La utrerana y el malagueño se conocieron a través de la red social Tuenti. Al parecer, ambos mantuvieron una relación de unos meses pero, al ser interrumpida por parte de la menor, José Antonio comenzó a acosar y amenazar a la niña. No en vano, la madre de ésta denunció hace un año dichos hechos, ya que incluso recibió una carta en la que el joven le pedía la sangre de su hija.
