Un ejemplar del almanaque. El equipo de gobierno en minoría de Juan Manuel Valle (IP-IU) ha repartido entre los vecinos 2.000 ejemplares de un almanaque muy particular, pues lo de menos en cada hoja es el calendario en sí, reducido a un cuadrito en la parte superior izquierda, y lo de más, la explicación detallada de la esforzada gestión económica del Ayuntamiento en los últimos dos años y medio. Edita la coalición gobernante, Izquierda y Progreso-Izquierda Unida (IP-IU). A cada mes del año se le asocia un lema sobre la pésima situación del Ayuntamiento, que debe más de 100 millones de euros después de 24 años del PSOE en el poder, aunque la mayoría de la deuda se generó durante los últimos siete años en que gobernó Antonio Maestre. En respuesta, el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento palaciego, Joaquín Bornes que no formaba parte de la corporación en la legislatura anterior ha invitado al alcalde y al gobierno municipal a que se gasten menos dinero en imprenta y les paguen las cinco nóminas que les deben a los funcionarios del Ayuntamiento. Bornes asegura que llevan casi tres años en el gobierno y no han hecho absolutamente nada, salvo llorar y quejarse, y añade: ¿Qué Ayuntamiento no tiene deudas?. El título de enero es El laberinto de las deudas, y en la hoja se detallan algunas de ellas, con cifras como los 26.804.504 euros del plan de pago a proveedores, los 1.799.988 euros de intereses bancarios, los 2.081.100 euros de débito a la Diputación o los 1.971.879 euros correspondientes a Seguridad Social impagada. En la hoja de febrero aparece un camarero con esmoquin bajo el cual puede leerse: Se acabaron las comilonas de gañote, y las entradas a los toros, y los trajes de flamenca y el whisky. Porque, según se detalla en el mes de mayo, las comidas en bares con cargo al presupuesto público durante el anterior gobierno eran todos los días; las entradas a las toros, 2 (que hayamos encontrado), las botellas de whisky 40 (en una sola comida), los capotes de torero, 1 y los trajes de flamenca (en referencia a los que, según IP-IU, cargó al erario público la edil socialista Rosario Ayala para lucirlos en la romería del pueblo y cuyo escándalo hizo dimitir como concejala, en abril del año pasado, a la que también había sido en la anterior legislatura delegada provincial de Obras Públicas y Transportes de la Junta. En marzo se destaca que se acaba con el derroche, y se dice que no se ha gastado en protocolo ni una tapa de ensaladilla. En abril se hace gala de la transparencia del nuevo gobierno al recordar: Cumplimos nuestra promesa de auditar Ayuntamiento e Idelpa y hemos denunciado a la Fiscalía todo lo que olía mal. Es julio el mes dedicado a Idelpa (Iniciativas de Desarrollo de Los Palacios SL), la empresa casi pública (97% de capital público) a través de la que el Ayuntamiento gestionaba la construcción de viviendas de protección y que generó, antes de quebrar, 21 millones de euros en deuda. ¿Dónde está el dinero de Idelpa?, puede leerse en grandes caracteres junto al dibujo de un trilero. En la hoja del mes de agosto se hace referencia a que muchas de las facturas de los casi 27 millones de euros que se les ha pagado a los proveedores eran en pesetas. Y en septiembre se informa de que el gobierno regulariza más de 800.000 euros en facturas escondidas, ocultas en los cajones, sin contabilizar, en el limbo. Se dejan para noviembre las grandes obras que dejó el PSOE sin pagar. Los 2.000 almanaques editados han sido la comidilla del pueblo, donde protagonizan chascarrillos y comentarios que inundan las redes sociales.