"El dato de que en Sevilla hay 5.000 empresas menos es duro, muy duro". El alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, admitió ayer que los resultados del informe Economía de Sevilla. Junio 2010 presentado el pasado jueves por los empresarios son bastante negativos, por eso apostó por "agudizar el ingenio y arriesgar". "Quiero mojarme", apostilló antes de anunciar que facilitará modificaciones urbanísticas "puntuales" para atraer la inversión.
El alcalde aseguró que está en conversaciones con "empresarios y emprendedores para fomentar la economía y el empleo". De ahí que se mostrase abierto a modificar, "aunque sea puntualmente", la reordenación urbana, el PGOU aprobado en 2006 tras muchos años de debate. Esto es, que se baraja cambiar la calificación de algunas bolsas de suelo para que tengan usos terciarios o industriales, según las necesidades de las empresas.
El objetivo, según Sánchez Monteseirín, es que cualquier empresa o iniciativa económica "que esté dispuesta a invertir en la ciudad y a crear empleo, por supuesto dentro de los parámetros del urbanismo sostenible, tenga todas las facilidades".
El modelo a seguir sería el convenio urbanístico firmado con Heineken y Abengoa, en cuyo campus tecnológico de Palmas Altas se celebró ayer la II Conferencia Estratégica Sevilla 2020.
En este marco, el presidente de la Cámara de Comercio de Sevilla, Francisco Herrero, aplaudió el anuncio del alcalde para facilitar la implantación de nuevas empresas y apuntó que "no todos los datos" económicos son malos. Como botón de muestra mencionó los efectos de la nueva esclusa del Puerto o los buenos resultados turísticos, pero añadió que antes de diseñar la Sevilla de 2020 se deben cumplir los objetivos marcados para 2010. Por eso exigió una selección "coherente" de los proyectos a desarrollar, entre los que deben estar, a su juicio, la SE-35, SE-40, la red del Metro, la conexión Santa Justa-aeropuerto, la ampliación de Fibes y la Ciudad de la Justicia.
Los sindicatos CCOO y UGT apostaron en la II Conferencia Estratégica Sevilla 2020 por lograr el equilibrio entre los proyectos de infraestructuras y las medidas sociales. Para sus responsables, el objetivo número uno debe ser la creación de empleo de calidad.
Antonio Pulido, presidente de Cajasol, sostuvo que ya nos encontramos "en un proceso lento de recuperación", para después hacerle un guiño a Sevilla: aseguró que tendrá su "peso específico" tras el plan de reestructuración del sector financiero. "Cajasol, que es juez y parte de la profunda transformación que ha vivido Sevilla, también tendrá un papel protagonista en la ciudad en el futuro más inmediato", sentenció Pulido.
Por otro lado, el alcalde anunció el pasado 17 de junio que a finales de ese mes se elegirían los 20 prioritarios del Plan Estratégico Sevilla 2020, pero dicha selección tendrá que esperar. La hoja de ruta de los "grandes" proyectos para 2020 no estará terminada hasta otoño.
Durante este mes de julio se abrirá un proceso de participación ciudadana sobre la base de las 232 propuestas, para que pasados los meses estivales la comisión ejecutiva, formada por el Ayuntamiento, empresarios, Cámara de Comercio, sindicatos y la Universidad, conforme el documento final. El alcalde apuntó que los proyectos prioritarios, en plena crisis, serán "pocos, pero claros, concretos e importantes para seguir avanzando".
