El diseño del Metro en el Centro es uno de los puntos clave de la negociación abierta entre la Consejería de Obras Públicas y el Ayuntamiento sobre el suburbano. Pese a que el siguiente paso será la línea 3 y resolver el debate abierto en torno a La Palmera, las dos partes implicadas están avanzando hacia un acuerdo que permita al menos llegar a las elecciones con un planteamiento cerrado y detallado. Ayer, tras la reunión con una amplia delegación de los empresarios, el delegado de Movilidad, Francisco Fernández, difundió una propuesta en la que basa el Ayuntamiento su modelo de movilidad para el Centro: “El Metro debe desempeñar una función de transporte de larga distancia. Acercar a la gente de los barrios al Centro, y de ahí usar otros medios. Creemos que el Centro debe haber sólo una gran parada de Metro, esté en la Encarnación, en Ponce de León o en el Duque. El transporte a partir de ahí se resolvería en superficie”.
Esta propuesta aún está pendiente de las negociaciones técnicas y puede ni siquiera entrar en la siguiente fase de construcción del Metro, pero viene a reflejar la postura municipal en dos debates abiertos. En primer lugar, ante las propuestas de los comerciantes del Centro que ven en el Metro la respuesta a lo que consideran un problema de movilidad en el Casco histórico ante la aplicación de controles y restricciones en los accesos. “Con un Casco histórico tan grande, hace falta un Metro subterráneo. Sin él no habrá una respuesta para que se puedan desplazar personas mayores y jóvenes”, resumió el presidente de la CES, Antonio Galadí. Según los planteamientos expresados ayer –por el alcalde en la reunión y por Fernández ante los medios– el subterráneo no se plantearía como el medio de transporte para desplazarse en el interior del Casco histórico, sino como vía para llegar. Y para eso bastaría con la estación de Puerta Jerez de la línea 1 y con otra parada de las líneas 2 o 3.
En segundo lugar, ante el debate técnico abierto sobre el Metro subterráneo o el tranvía en superficie. Técnicamente, además de la distancia, el Metro en el Centro ofrece problemas técnicos y económicos por la gran profundidad de la obra. De ahí las reticencias de la Junta de Andalucía para entrar a financiar paradas en el Casco histórico. Ante esta situación, el Ayuntamiento, que el pasado verano había difundido su renuncia al diseño inicial del tranvía, ha rescatado su proyecto de línea circular de Metrocentro para las calles del núcleo urbano, una opción que cuenta con un gran impedimento: el modelo de tranvías de CAF.
El Ayuntamiento asegura contar ya con la tecnología adecuada, que tendrá como punto de partida el próximo verano cuando comiencen las pruebas para que el Metrocentro funcione sin catenarias. Con este nuevo sistema, que cuenta con un acumulador de carga rápida, con una autonomía de 1,4 kilómetros que se recargaría en las paradas, arranca un proceso que debe derivar, según los planteamientos del Ayuntamiento, en la implantación en Sevilla del diseño Urbos 3 de CAF un nuevo modelo de vehículos con una mayor facilidad de movimientos más acorde con el trazado del casco histórico.
Sin más parkings en el Centro
El proyecto de la Estación de Cádiz se frenó porque la empresa adjudicataria no vio rentable abrir un aparcamiento de rotación en la zona. Ayer a las once de la mañana, el 40% de las plazas de los estacionamientos públicos estaba desocupada. Éstos fueron los dos argumentos utilizados ayer por el Gobierno municipal para rechazar la petición de los empresarios de abrir más aparcamientos antes de restringir el tráfico en el Centro. La CES llegó incluso a plantear en el borrador que presentó dos proyectos contrarios al diseño de ciudad del Gobierno: estacionamientos en Plaza Nueva y la Alameda.
Las propuestas de los empresarios
- Pérdidas: Los representantes de los empresarios de Sevilla atribuyen el desplome del sector a la crisis y al efecto de las peatonalizaciones y las obras. La CES llegó a aludir ayer a vías en las que ha cerrado el 80% de los establecimientos. “No podemos luchar contra las obritas en las aceras”, llegó a señalar el presidente de la patronal Antonio Galadí en referencia al Plan 8.000.
- Negociación: La patronal destacó que la reunión celebrada ayer debe marcar un punto de inflexión en las relaciones entre los empresarios y el Ayuntamiento, no tanto por los avances, sino por las formas. Según Galadí, la reunión se convocó con cierta premura y en un ambiente de diálogo. El representante del CES destacó además la creación de una serie de mesas de trabajo y el compromiso del Ayuntamiento de remitir por escrito una respuesta detallada a todas sus propuestas.
- Peatonalizaciones: Los empresarios expresaron su rechazo a intervenciones como las de San Jacinto y la calle Asunción por considerar innecesarias sus peatonalizaciones. “No se debe proceder a nuevos cortes de tráfico mientras no se articulen medidas alternativas y eficientes de movilidad (...) Hay que evitar la destrucción indiscriminada del aparcamiento en superficie”. Los empresarios reclaman que se potencien los nudos de intercambiadores y la implantación de “verdaderas lanzaderas para los puntos de difícil penetración”.
- Turismo: Los empresarios piden una señalización turística integral de la ciudad y actualizar la de los hoteles. Además, piden nuevas paradas para los autobuses turísticos panorámicos como la Basílica de Macarena.
- Sentido único: En el documento entregado al Gobierno local los empresarios reclaman “no implantar el sentido único en nuevas zonas” sin consensuar con los vecinos un plan global de movilidad para el área.
