El delantero argentino del Sevilla Lautaro Acosta ha admitido que "obviamente" le falta "fútbol y ritmo" que irá "ganando con los minutos de juego", ya que, según ha recordado, el del domingo en Almería era "sólo el tercer partido" jugado con la camiseta sevillista.
"Me encontré bien a nivel personal, aunque me faltó un poco de ritmo, se notó al final cuando perdí el ritmo inicial y perdí algunas pelotas por el cansancio. Más allá de eso, me sentí bien", ha dicho Acosta.
El joven argentino ha bromeado con la valoración que hicieron sus familiares que "vieron el partido desde Argentina, son más críticos y sólo dieron un aprobado y no pasaron de ahí".
El campeón olímpico en Pekín ha asegurado que no se pone "un objetivo puntual de siete u ocho goles" para la temporada, aunque ha afirmado que "jugando un poco más de minutos y agarrando el ritmo los goles van a llegar solos, porque el equipo crea muchísimas situaciones".
Sin embargo, ha subrayado que "la cuestión de los minutos es complicada porque hay muy buenos jugadores y muy buena competencia".
Acosta ha destacado su polivalencia al recordar que en el Lanús jugó "primero por fuera, en la banda derecha, luego en la izquierda y, finalmente, de delantero", por lo que ha afirmado que nunca tuvo "ningún inconveniente", aunque jamás fue el ariete, pues contaba "con gente como Graff, Fabbiani o Sand, ellos eran los referentes del área" y él actuaba de mediapunta.
Sobre el Stuttgart, rival del Sevilla el jueves en la Copa de la UEFA, Acosta lo ha definido como "un equipo fuerte, duro e importante" ante el que los sevillistas deberán "estar tranquilos y hacer las cosas bien, el equipo no va a depender de nadie".
