Luis Oliver, a su llegada al Betis en 2010 / Javier Cuesta
El juez que investiga la gestión de Luis Oliver en el Betis dictó el pasado 28 de marzo un auto de procedimiento abreviado con el que finaliza la fase de instrucción y dirige la acusación contra seis personas por presuntos delitos de administración desleal y blanqueo de capitales.
Las personas contra las que se dirige la causa son el propio Luis Oliver junto al expresidente José León y el exvicepresidente Jaime Rodríguez Sacristán, además de los empresarios José María Gálvez, José Angel Mayayo e Isabel Escrig, ligada a varias empresas de Oliver.
Fuentes del caso han informado de que el juez ha sobreseído la causa contra otros tres colaboradores de Oliver que a lo largo de la causa declararon como imputados: Plácido R.D., Magdalena P.G. y José Julio A.V.
El juez sustituto del juzgado de instrucción 6, Álvaro Martín, abrió estas diligencias por presunto delito societario derivadas de las que mantiene abiertas la juez titular, Mercedes Alaya, contra Manuel Ruiz de Lopera por su gestión del Betis.
Oliver, que en el año 2010 compró a Lopera sus acciones en el club deportivo y durante algunos meses fue su máximo accionista, fue acusado del cobro de comisiones millonarias en el traspaso de los jugadores Mehmet Aurelio y Sergio García y por contratar servicios de auditoría y consultoría a empresas de su entorno, pese a que el Betis disponía de tales servicios.
Por el traspaso de Mehmet Aurelio el Betis tuvo que pagar 354.000 euros y por el de Sergio García 589.000, cantidades que acabaron revirtiendo en empresas vinculadas al propio Luis Oliver, según se recoge en el auto del juzgado de instrucción número 6. En el mismo, también se constata el cobro por parte de Oliver de 146.200 euros a través de Orion Consultoria y Gestión por servicios de asesoría y el pago de 35.500 euros por parte del Betis a la empresa auditora Deleytax Auditores por una due diligence sobre las cuentas del Betis que debió haber abonado la sociedad Bitton Sport, y no el propio Betis.
Los gastos, que según la acusación eran injustificados, dieron lugar al despido de trabajadores de plantilla del Real Betis y se aprobaron con el consentimiento del entonces Consejo de Administración.
León declaró como imputado en octubre de 2013 y afirmó al juez que en aquella época se hacía en el club lo que decidía Oliver, igual que antes se hacía según las decisiones de Manuel Ruiz de Lopera, anterior máximo accionista.
Al haberse abierto juicio por un presunto delito de blanqueo de capitales, la causa corresponderá para su enjuiciamiento a la Audiencia de Sevilla en caso de que la Fiscalía y las asociaciones béticas personadas presenten escrito de acusación.
El juez ha dado traslado a las partes para que presenten su calificación de los hechos o soliciten el sobreseimiento, en un auto que reproducimos íntegro. La Liga de Juristas Béticos, Béticos por el Villamarín, Por Nuestro Betis y el propio Betis ejercen la acusación particular. Por estas acusaciones de delito societario continuado y blanqueo de capitales, la ley contempla de dos a cuatro años de prisión y Luis Oliver ya cuenta con antecedentes por haber sido condenado en firme por llamar «nazi» a la juez Mercedes Alaya, por lo que como vuelva a ser condenado tendrá muy complicado eludir el ingreso en prisión.
PINCHE PARA VER EL AUTO COMPLETO
