Uno de los ejes del plan del alcalde para Tablada pasa por que la Junta elabore otro diseño de la dehesa sobre el borrador que ya elaboró el profesor de Biología Fernando Sancho Royo que planteaba aprovechar los 360 hectáreas para plantar un gran bosque y un jardín botánico, entre otros elementos. El pasado mes de abril, ya alertó cuando se abrió el debate sobre el traslado de la Feria a los terrenos de Tablada de que no encajaba en su modelo, dado que habría que urbanizar una parte para introducir las conducciones y canalizaciones necesarias. Ayer, tras observar el cambio de estrategia del alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, recordó a este periódico las bases de su trabajo y subrayó las "escasas opciones" que hay para establecer una negociación sobre los usos del terreno, propiedad del grupo empresarial Tablada Hispalis.
"No hay muchas posibilidades. Este suelo está catalogado como no urbanizable y con riesgo de inundaciones, lo que provoca que, según la Ley de aguas, no se pueda construir, una restricción que también aparece en el plan Hidrológico de la Confederación. Además, está señalado en el Plan General de Ordenación Urbanística como suelo rústico".
Hay una segunda posibilidad en el marco de las futuras negociaciones: modificar el justiprecio, fijado hasta ahora en 7 millones de euros, un valor ínfimo en comparación con las cifras que manejan los propietarios de la dehesa -que la adquirieron tras comprársela a las cajas de ahorro El Monte y San Fernando-. El problema es que éste legalmente se debe fijar según la catalogación legal del suelo: "Son suelos rústicos y el margen es muy reducido dada la Ley del Suelo actual".
Pese a esto, Sancho Royo sí asume que es necesario un nuevo proyecto sobre el trabajo que él realizó: "Aquel estudio debía valorar la importancia y las posibilidades de los terrenos, y establecer los principios botánicos sobre los que hacer un diseño operativo del parque periurbano. Era un estudio previo, pero ahora hay que realizar todos los trámites necesarios para diseñar el parque periurbano".
Ése es el objetivo de la propuesta lanzada por el alcalde, que parte con un handicap: los terrenos no sólo no son propiedad pública, sino que están condicionados por un proceso legal debido a los recursos existentes sobre la titularidad del suelo, que dependen de un recurso del Supremo.
De hecho, el motivo por el que su trabajo tiene un alto nivel de indefinición es que no se conocían exactamente ni los límites del terreno objeto de los estudios ni las posibilidades reales. "Antes de definir exactamente cómo se diseña el parque periurbano, es necesario ver cómo es la parcela, hacia donde está orientada. No se puede diseñar el parque periurbano en el aire", advirtió el profesor universitario.
