El concejal de Movilidad del Ayuntamiento, Francisco Fernández, dio la razón a los vecinos de los bloques adjuntos a la obra del párking que se construye en la Ronda de Triana y admitió que los edificios se han movido aunque, precisó, "muy" por debajo de los máximos que garantizan la seguridad.
Francisco Fernández relacionó por primera vez los movimientos de los bloques con la obra del párking, pero añadió que estaban dentro de los márgenes de cimbreo que permite la junta de dilatación. Otra cosa es la inclinación de dos centímetros hacia adelante de uno de los bloques -Manuel Arellano, 34- que hace dos días denunciaron los vecinos. Fernández subrayó que los movimientos están dentro de los parámetros exigibles de seguridad. "Se está haciendo un seguimiento diario, casi horario" del bloque afectado, dijo, con "con mediciones topográficas diarias", y destacó "la transparencia desde el primer momento para disipar unos temores lógicos y legítimos".
Fernández se reunirá con los vecinos para ofrecerles "la ultimísima hora" e insistió en que "a través de la fluidez de la información y la transparencia se contribuirá a generar serenidad". Los vecinos por su parte le reclamarán el famoso informe que Fernández ha mencionado en varias ocasiones y que parece decir que las grietas de los inmuebles son anteriores a la obra del párking.
"No hemos dicho que no se haya abierto el edificio, sí se ha movido, nunca hemos dicho que no, sino que no hay grietas nuevas, la junta de dilatación ya estaba abierta", quiso aclarar el edil de Movilidad, quien agregó que "los técnicos dicen que la junta de dilatación está para eso, para absorber los movimiento del edificio". Los vecinos, cuya portavoz es Concha Sánchez, denuncian que las grietas se han ensanchado en pocos días y que uno de los bloques se ha separado ya dos centímetros del resto, inclinándose "hacia adelante y hacia la derecha".
Con respecto al socavón que se produjo en la calle, Fernández recordó que "estaba previsto y controlado", y resaltó que "en menos de 48 horas se cubrió", al igual que "otras filtraciones" que se han producido. No obstante, insistió en que "se está haciendo un seguimiento técnico mucho más escrupuloso, con detalle extremo" y reiteró que "no hay nada que haga temer por la seguridad del edificio, porque todos los edificios se mueven, la Catedral se mueve a diario y lleva siglos ahí".
El PP se ha hecho eco del temor de los vecinos y reclama al Consistorio que le muestre el informe previo a las obras.
