El Ayuntamiento de Castilleja del Campo (Sevilla), gobernado por Narciso Luque (PSOE), ha acordado en el seno de su pleno "suspender" la remodelación del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y redactar un nuevo documento "prácticamente desde cero", entendiendo el Consistorio que este instrumento de planeamiento rechazado en 2007 por la Comisión provincial de Ordenación del Territorio y Urbanismo ha quedado "obsoleto" y su ajuste a las normativas es "demasiado complicado".
El alcalde de Castilleja del Campo recordó a Europa Press que en 2007, la Comisión provincial de Ordenación del Territorio y Urbanismo rechazó dicho plan dadas sus "deficiencias" y su incompatibilidad con el Plan de Ordenación del Territorio de Andalucía (POTA), que limita el crecimiento urbano al 40 por ciento y el demográfico al 30 por ciento en periodos de ocho años. A tal efecto, se encargó una reformulación del documento a la Diputación provincial, porque el planeamiento rechazado contemplaba ampliar el parque de viviendas de 269 inmuebles a 1.109 facilitando un crecimiento poblacional desde los 673 habitantes a los 2.773.
No obstante, pasado dos años desde aquel momento, Narciso Luque advirtió de que los primeros pasos para la redacción del nuevo PGOU se remontan a la década de los años 90 y a día de hoy "es un documento que ha quedado obsoleto", por lo que el pleno del Ayuntamiento ha acordado suspender los trámites administrativos correspondientes a su reformulación y nueva entrega a la Comisión provincial de Ordenación del Territorio y Urbanismo. "Es demasiado complicado ajustar el documento", dijo en cuanto a normativas como el POTA o la Ley de Ordenación Urbana de Andalucía (LOUA). De esta forma, explicó que el Ayuntamiento ha solicitado una subvención a la Junta de Andalucía para contratar un equipo redactor que elabore un nuevo documento de planeamiento "prácticamente desde cero".