En los últimos meses el Ayuntamiento ha invertido más de 100.000 euros en la reforma de dos parques infantiles en Torreblanca muy deteriorados por el vandalismo. Esta semana, el Gobierno local reclamó a los vecinos implicación en el cuidado de estos espacios para evitar que vuelvan a sufrir destrozos.
El Ayuntamiento quiere que en estas zonas de la ciudad se aplique el mismo modelo que se puso en marcha en el Parque Ranchito de Torreblanca donde, según informó el Gobierno local en un comunicado, son los vecinos de la zona los que colaboran en el mantenimiento y fomentan un uso adecuado de las instalaciones. Para ello, el delegado del distrito Este-Alcosa-Torreblanca se reunió con representantes de distintas asociaciones de la zona, desde comerciantes, hasta entidades deportivas pasando por colectivos de mujeres. "La experiencia que hemos tenido nos anima a a lograr la implicación de las entidades del barrio como fórmula válida para una mejor conservación de esta zona", apuntó el concejal.
El objetivo es buscar soluciones ante el elevado número de actos vandálicos y de destrozos que sufren los elementos del mobiliario urbano, así como las zonas infantiles que obligan a continuas actuaciones de reforma. Éste fue de hecho uno de los objetivos de la ordenanza antivandálica que lleva ya casi un año en vigor y que endurece las sanciones por todo tipo de conductas vandálicas que afecten a la vía pública y a las zonas comunes. Estaba previsto que esta normativa viniese acompañada de la creación de una unidad específica de la Policía que está bloqueada a la espera de la reordenación del Cuerpo de la Policía Local.
Precisamente el PP, a través de su portavoz municipal, Juan Ignacio Zoido, criticó ayer la falta de aplicación de la ordenanza: "Los actos vandálicos no están siendo sancionados como recoge la ordenanza. Hay una gran falta de seguridad en la ciudad y los vecinos están cansados de encontrarse coches quemados en las puertas de sus casas y restos de muebles quemados. No hay suficientes policías en la ciudad".
