Serán los propios trabajadores municipales, adscritos a cualquier concejalía o área municipal, los que usen este vehículo para sus desplazamientos y traslados desde sus domicilios al lugar de trabajo, así como para la movilidad entre los distintos espacios.
Se trata de un proyecto puesto en marcha mediante la concesión de una ayuda por parte de la Consejería de Medio Ambiente a la concejalía de Medio Ambiente de Utrera, enmarcada en el Programa de Sostenibilidad Ambiental Ciudad 21. El importe total de dicha subvención es de 28.500 euros, parte de los cuales debían destinarse a la compra de las bicicletas que vengan a suponer el uso de un medio de transporte más limpio y, en consecuencia, más sostenible.
Las bicicletas, que tienen carácter de vehículo oficial y pertenecen a la flota municipal, están equipadas con cesta, portadocumentos y candados, y destinadas a su uso en ciudad.
Poco antes del pequeño paseo que se dieron por el patio interior del consistorio en uno de los ejemplares adquiridos, el alcalde, junto al edil de Medio Ambiente, Juan Bocanegra, procedieron a la entrega de las bicicletas que a partir de ahora podrán utilizar los trabajadores del Ayuntamiento de Utrera.
El responsable municipal de Medio Ambiente destacó que, con este proyecto, se pretende "dar un ejemplo a la ciudadanía del fomento de la bicicleta como medio de transporte alternativo y sostenible, disminuyendo la emisión de gases a la atmósfera y la contaminación acústica".
De igual modo, supondrán un ahorro económico a las arcas municipales, "reduciendo el gasto en la compra de carburante y las reparaciones en el taller". Todo este ahorro no viene nada mal en época de crisis y con las arcas municipales castigadas, como en cualquier consistorio en el país, aunque el concejal incidió fundamentalmente "en su uso como vehículo ecológico".
