Los propietarios de edificios que no presenten en plazo la Inspección Técnica de Edificaciones (ITE) se enfrentan a multas de 600, 3.000 o 6.000 euros según se considere la infracción leve, grave o muy grave. En el caso de los edificios más antiguos, el incumplimiento se considera una falta muy grave. Sin embargo, los alrededor de 400 edificios municipales que hay en la ciudad, según fuentes del Ayuntamiento, buena parte históricos, no han pasado la ITE, la revisión obligatoria para garantizar la buena conservación y seguridad de las fincas.
Pese a que el Gobierno de Juan Ignacio Zoido sí reclama esta ITV de los edificios a monumentos de otras administraciones como las Atarazanas de la Junta (a la que abrió expediente sancionador porque debió pasar la ITE en 2009) o a inmuebles cuya titularidad es compartida con agentes privados, como el Mercado del Arenal, libra de tal informe al resto de sus propiedades. Según fuentes municipales, la razón es que sus edificios ya pasan revisiones periódicamente, «informes y pruebas incluso superiores a las que exigen las ITE», sostienen.
Estas mismas fuentes alegan que el Gobierno local no se puede fiscalizar a sí mismo y que hay un equipo técnico específico en el área de Edificios Municipales y Patrimonio que se encarga de realizar estos análisis. Además, sostienen que, por ejemplo, los colegios públicos han pasado recientemente revisiones y que fruto de ello se han establecido las próximas actuaciones de conservación para subsanar las deficiencias detectadas. Incluso alegan que las entidades locales tienen una normativa específica relativa a la conservación de sus bienes.
Eso sí, ni los formularios ni el formato ni los plazos son los mismos que el Gobierno local estableció para el resto de los edificios de la ciudad. Así, pese a que en la web de la Gerencia de Urbanismo hay un registro informatizado de las Inspecciones Técnicas de Edificaciones, las fichas de los edificios municipales, que sí están incluidas, aparecen en blanco, como publicó el diario digital Viva. No obstante, el Consistorio no descarta que se facilite información sobre el estado de conservación de sus edificios, el tiempo transcurrido desde su última inspección y de la necesidad de obras.
Lo cierto es que edificios como el teatro Lope de Vega, el propio Consistorio (construido entre 1527 y 1566), el mercado de la Puerta de la Carne, la estación de Cádiz, la estación de autobuses del Prado, el pabellón de la Marina, el edificio administrativo de la calle Pajaritos, Jobo, la torre de la Plata, el de la calle Montepirolo, el hogar de San Fernando, Virgen de los Reyes, los inmuebles administrativos de las calles Becas, Silencio, Baños, Antonio Díaz, el edificio Laredo, el centro del Tejar el Mellizo, Villa Encarnita, el CREA de San Jerónimo... y otros muchos edificios municipales no han pasado la ITE. En total, incluidos colegios, son unos 400.
La mayoría de ellos tendría fijada como fecha límite para presentar la inspección obligatoria el 6 de julio de 2012, dado que su fecha de construcción está comprendida entre 1930 y 1954. Además, si muchos de estos edificios pasasen la ITE, el Ayuntamiento se vería obligado a subsanar los desperfectos encontrados por los técnicos y, por ejemplo, tendría que poner fin al mal estado que el propio Gobierno admite en inmuebles como la estación del Prado, por la que tiene un pleito pendiente con la Junta porque quiere cambiarla de uso para poder hacer frente a su restauración.
El pasado jueves, el delegado de Urbanismo, Maximiliano Vílchez (PP), insistió en que «no se puede consentir» que la Junta «no conserve» las Atarazanas tras recordar que no presentaron la ITE, pese a que el plazo terminó en 2009.
