El Ayuntamiento de Sevilla restaurará las fachadas renacentistas de la Casa Consistorial, del siglo XVI y que en su primera fase corresponden a la este y la sur del Arquillo, una "joya de la mejor arquitectura renacentista española con influencia italiana", ha anunciado hoy el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín.
Esta intervención, promovida por el Patronato del Real Alcázar y de la Casa Consistorial, comenzará dentro de un mes y durará ocho meses, con 120.000 euros de inversión, han destacado en su presentación el alcalde y la arquitecta María Dolores Robador, autora del proyecto, que como símbolo ha sido el primero que ha conocido la Comisión Local de Patrimonio Histórico constituida hoy.
Tras recordar otros proyectos realizados por este patronato desde que en 2005 se hizo cargo además de la conservación del Consistorio, Monteseirín ha dicho que la actuación en las fachadas del Arquillo responde a los "muchos síntomas" de daños y desprendimientos detectados, y la ha autorizado la Delegación de Cultura de la Junta.
Además de calificarlo de "gran edificio, muy singular y testigo mudo de la epopeya que vivió Sevilla en el siglo XVI" cuando era "la capital del mundo", Robador ha explicado que la restauración abarca las fachadas este y sur del Arquillo, más las superficies y la magnífica bóveda muy rebajada de cruceros revirados" de su interior.
Ha precisado que los daños y alteraciones en los sillares y morteros afectan a toda su superficie, como disgregaciones, pérdidas de masa sobre todo en los conjuntos escultóricos, todo tipo de rupturas, fracturas y fisuras, filtraciones y humedades, o aparición de sales en la piedra, costras, líquenes o excrementos de palomas.
Según la arquitecta, harán "una intervención adecuada conforme a las alteraciones que presenta cada elemento" y siempre "con el mayor cuidado y respetando al máximo todos sus elementos", con el uso de "materiales naturales y adecuados" para su mayor duración posible.
La restauración, que mantendrá en todo el proceso "el primordial criterio de fidelidad al origen", incidirá en la consolidación y la protección de la piedra de este edificio para legarlo en las mejores condiciones a las generaciones futuras, ha subrayado Robador.
Así efectuarán procesos de limpieza de la piedra, sales, costras, materiales nocivos y víctores, y un tratamiento de protección para frenar el deterioro; refuerzos estructurales de las fachadas y los elementos escultóricos deteriorados; ensamblado de piezas sueltas; eliminación y sustitución de morteros dañados por otros compatibles controlados; impermeabilización de cornisas, gárgolas y otros puntos de humedad; y consolidación y protección de las piedras alteradas y las esculturas.
Esta parte más antigua del edificio consistorial, las Casas de Cabildo de la Plaza de San Francisco de Sevilla, es de estilo renacentista plateresco (1528-1574), era lo más avanzado de aquella época y la empezó a construir el gran arquitecto Diego de Riaño, al que relevaron tras su muerte Juan Sánchez y Hernán Ruiz, entre otros.
