El Barça lo tiene todo a su favor para pasar a los cuartos de final de la Liga de Campeones a costa del Olympique de Lyon: la posibilidad de resolver la eliminatoria en casa, después del cojín del 1-1 de la ida, y frente a un equipo al que siempre ha ganado en el Camp Nou.
El gol marcado por Thierry Henry en la ida vale su peso en oro. El francés igualó el tanto inicial marcado por Juninho Pernambucano y permitió al Barça respirar, después de un partido dominado por los lioneses durante muchos minutos.
A pesar de que la historia de los enfrentamientos europeos recuerda que el Barça no ha pasado en sus tres eliminatorias frente a equipos franceses (OGC Niza, Metz y Paris Saint Germain), también determina que el Lyon nunca ha ganado al Barça y que los azulgrana han pasado la eliminatoria las cinco últimas ocasiones que ha afrontado el partido de vuelta en casa.
Después de las turbulencias vividas después de los cinco partidos en los que el Barça no ganó, lo que permitió perder 8 de los 12 puntos de diferencia que tenía al frente del campeonato doméstico, los de Pep Guardiola se han rehecho tras ganar convincentemente ante el Athletic (2-0).
Esa victoria, el empate madridista, pero sobre todo la notable mejoría en el juego permiten al Barça respirar tranquilo. Los azulgrana, siendo fieles a su fútbol, se sienten superiores y no saldrán a especular con el resultado, simplemente porque esa posibilidad no figura en su libro de estilo.
Guardiola tiene dos bajas en defensa, lo cual simplifica bastante las opciones. Sin Carles Puyol ni Eric Abidal, ambos lesionados; Dani Alves, Rafa Márquez y Gerard Piqué son fijos en la retaguardia. La única plaza libre es el lateral izquierdo, que se la disputan Sylvinho y Martín Cáceres.
En el centro del campo, existen diferentes opciones. Touré Yayá descansó ante el Athletic, donde la tripleta de centrocampistas, los canteranos Busquets, Xavi e Iniesta estuvieron a un nivel espectacular. Es probable que Touré acompaña a Xavi e Iniesta en esta zona.
En la delantera, a pesar de la cantidad de ocasiones marradas por los delanteros, Guardiola confiará en la magia de Leo Messi y la pólvora de Samuel Eto'o y Thierry Henry.
