El FC Barcelona afronta hoy en Cracovia el encuentro de vuelta de la tercera fase de la ronda previa de la Liga de Campeones, un partido rebajado por su tremenda goleada en la ida (4-0) y que no debería suponer más que un trámite para el equipo azulgrana.
Cuenta sus partidos por victorias el Barça desde que Guardiola asumió el mando, dato que avala a un equipo empeñado en recuperar su mejor versión sin renunciar a su estilo: posesión de la pelota, ocupación racional del campo y trabajo colectivo. Entre los aspectos a mejorar, los ajustes defensivos y las jugadas en contra a balón parado.
Fiel a su estilo de ensamblar al vestuario en la medida de lo posible, Guardiola ha hecho viajar a Polonia a todos los futbolistas disponibles, a excepción de Leo Messi, que disfruta en Barcelona de su oro olímpico. A la hora de cantar la alineación, sin embargo, el técnico podría introducir algunas novedades con respecto al primer once liguero.
Con Dani Alves de vuelta pero aún no del todo recuperado del esguince en la clavícula que sufrió en la ida, Puyol podría ocupar el lateral derecho, con Márquez y Piqué como centrales, por más que Cáceres podría debutar en partido oficial. Con varias opciones para llenar la medular, Guardiola parece inclinarse más por Keita que por Touré como ancla del equipo. Gudjohnsen, teórico suplente, compartiría con Iniesta o Xavi la creación de juego.
De paseo por Cracovia . La visita al Wisla servirá para volver a ver en acción a una de las revelaciones de la temporada, Pedro, siempre bullicioso en el extremo derecho, además de comprobar el punto de inspiración de Samuel Eto'o, el máximo goleador del verano azulgrana.
Aunque encabeza cómodamente su Liga, la Ekstraklasa, después de tres victorias en tres partidos, el equipo polaco recibirá al Barça con la moral más bien baja. El 4-0 del partido de ida aún pesa mucho en las filas del Wisla. Pero a pesar de esta desigualdad evidente, el Wisla quiere dar su mejor imagen y ofrecer espectáculo ante sus aficionados.
Probablemente, el técnico polaco Maciej Skorza alineará a los mismos jugadores que ganaron el último partido de liga, frente al GKS Belchatov, con el delantero Pawel Brozek como gran referencia en ataque.
Mientras, parece que los aficionados polacos no están tan interesados por este encuentro como la directiva del Wisla pensaba, y puede que no se llene el estadio, en parte por el alto precio de las entradas.
