El Barcelona de Leo Messi se proclamó hoy campeón de Liga por vigésima vez en su historia y segunda consecutiva después de un apasionante duelo con el Real Madrid de Cristiano Ronaldo que sólo pudo resolverse en la última jornada del torneo, cerrado con el descenso de Xerez, Valladolid y Tenerife.
El Barcelona enfiló la trigésima octava jornada con un punto de ventaja sobre el Real Madrid, que a la conclusión subió a tres (99-96) después de su triunfo por 4-0 sobre el Valladolid y el empate a un gol de los blancos en Málaga.
Si esta temporada se planteó también como un duelo entre los dos mejores jugadores del mundo, Messi le ganó la partida a Ronaldo, no sólo con la conquista del título sino con su proclamación como máximo artillero, con 34 goles contra 26 del astro portugués.
Messi lideró una vez mas el triunfo del Barcelona con dos tantos, que unió a los anteriores de Pedro y al de Luis Prieto en propia meta, que abrió la goleada que condujo al título, octavo de Pep Guardiola, seis de ellos como jugador.
Con sus tantos de hoy, Messi igualó los que marcó Ronaldo Luiz Nazario en la temporada 1996/97. En total, la estrella argentina ha sumado 47 en todas las competiciones. Además, el Barcelona bate el récord liguero de puntos.
A Cristiano Ronaldo le tocó la cruz de la moneda. En su primer temporada en el Madrid, se quedó sin título alguno. Y no marcó en la última jornada. Fue su compatriota Duda el que enfrío el ánimo blanco al anotar a los nueve minutos de juego. En el 49, el holandés Rafael Van der Vaart igualó un partido que se disputó con la mirada puesta en el Camp Nou.
"El Real Madrid no se puede permitir una temporada sin títulos", dijo a "Canal Plus" después del partido el director general del Real Madrid, Jorge Valdano, que reconoció que a partir de ahora se abre un debate interno en el club sobre el futuro del técnico, el chileno Manuel Pellegrini.
La batalla por evitar el descenso también llegó a la última jornada.
Dos goles del burundés Mohamed Tchité firmaron la victoria del Racing de Santander sobre el Sporting de Gijón que valieron la permanencia.
El Xerez empató en Pamplona ante el Osasuna, pero necesitaba la victoria y una combinación de resultados que no se produjo. Se anticipó el equipo de casa con un gol del portugués Dady en el 55 y empató Antoñito seis minutos después.
Un gol de Alexis Ruano en el último minuto dio la victoria al Valencia ante el Tenerife y envió al equipo canario a Segunda División.
En los partidos adelantados al sábado, el Sevilla, con un gol de Rodri en el minuto 94, se impuso por 2-3 en Almería y se clasificó, como cuarto, para la fase previa de la Liga de Campeones.
En la misma pelea, el Mallorca cumplió en casa con un triunfo por 2-0 (Víctor y Mario Suárez) sobre el Espanyol, pero se llevó el disgusto del gol de Rodri en Almería que les hurtó la cuarta plaza. Algunos de sus jugadores lloraron, aunque el equipo jugará la Liga Europa.
El Getafe accedió también accedió a la Liga Europa. Se aprovechó de la resaca de la conquista de dicho trofeo por el Atlético de Madrid para ganar en el Vicente Calderón por 0-3, dos de Roberto Soldado y uno de Dani Parejo.
El Villarreal fue el perjudicado en esta pugna al no pasar del empate en Zaragoza. Tenía que vencer y que no lo hiciese el Getafe. Los locales se pusieron por delante con un sorprendente 3-0 en 34 minutos (el portugués Eliseu, Adrián Colunga y Rubén Pulido). Los visitantes equilibraron con Santi Cazorla (2) y el italiano Giuseppe Rossi.
En un duelo en el que ninguno de los dos se jugaba nada, el Athletic de Bilbao derrotó en San Mamés al Deportivo de La Coruña por 2-0 (Iker Muniain y Javi García), en un encuentro que sirvió para despedir al ex internacional Joseba Etxebarría después de 514 encuentros con la camiseta rojiblanca.
