Schommer realizó ésta y otras afirmaciones más a lo largo de la conferencia de prensa en la que el Museo Bellas Artes de Bilbao presentó la primera gran retrospectiva que dedica en su historia al internacionalmente reconocido fotógrafo vitoriano, de quien exhibe un total de más de 100 obras creadas durante sus 55 años de carrera profesional.
La muestra, abierta desde hoy y hasta el próximo día 16 de mayo, está divida en tres apartados bastante diferenciados: Primera época, Paisajes y escenarios urbanos y Experimentación y puesta en escena, que recorren lo más importante de la obra de Schommer desde las primeras fotografías en su Vitoria natal en el año 1955 hasta la serie de Cascografías volumétricas, realizadas el año 2008.
La exposición incluye también varios de sus célebres retratos a personalidades españolas e internacionales pertenecientes al mundo de la cultura como son los poetas Gabriel Celaya, Rafael Alberti o José Hierro; pintores como Salvador Dalí o Andy Warhol; arquitectos como Eduardo Chillida; intelectuales como José Luis Aranguren y artistas como Antonio el bailarín.
Durante la presentación de la muestra, Schommer aprovechó para definirse como “una persona que desea hacer una obra para los demás, para que los demás queden satisfechos con esa obra”.
“Fui pintor, medio arquitecto e hice películas y, en última instancia, me di cuenta, gracias a Irving Penn (fotógrafo estadounidense especializado en la moda y en la realización de retratos) de que yo tenía que ser fotógrafo”, relató Schommer, a quien museos como el Georges Pompidu de París o el Reina Sofía de Madrid, han dedicado ya exposiciones.
Schommer afirmó que en fotografía ha dado “todo lo que creía que podía dar” y sobre el momento que vive el mundo del arte considera que “hay una especie de pequeña desorientación de por dónde van a ir las líneas de los nuevos trabajos artísticos”.
Tras asegurar que “la fotografía es el futuro del arte”, Schommer ha revelado que “Alemania es donde los artistas están dando un do de pecho y sus fotógrafos son los que más están trabajando por buscar una forma o un medio que pueda diferenciarse de todo” lo que se ha hecho hasta ahora en este campo.
Sobre sus planes de futuro, Schommer ha revelado que le gustaría viajar a China para fotografiar al país asiático y a Brasilia, la capital administrativa de Brasil, porque “es una cuidad donde se podrían estudiar factores urbanísticos y humanos muy interesantes”.
Schommer declaró también su interés y preocupación por la situación del África negra, su arte y sus habitantes, continente que considera que se encuentra abandonado de todos y en manos de “dirigentes atroces”. “Me gustaría hacer algo sobre Mali, porque África merece la pena ser retratada”, subrayó el protagonista del encuentro con los medios de comunicación.
El comisario que se ha encargado de seleccionar las obras a exponer, Alejandro Castellote, teórico de la fotografía y especialista en la obra de Schommer, destacó del autor alavés que frente a otros que han “fotografiado la parte oscura del ser humano, Schommer siempre ha dirigido su mirada al lado positivo de la humanidad para hacer ese canto a la bondad del ser humano que ha caracterizado toda su carrera”.
