El canterano del Real Betis Manu Gavilán estampará su firma en las próximas horas en el contrato del Bolonia, que milita en la Serie A y que abonará 360.000 euros por la gestión en concepto de los derechos de formación y promoción.
El '9', campeón europeo y nacido el 12 de julio de 1991, recalará en la entidad romaña después de, según advierten en La Palmera, haber roto de manera unilateral un contrato regulado por una cláusula indemnizatoria de 6 millones de euros.
El agente del goleador, Eusebio Rufián, ya ha viajado al país transalpino para perfilar un acuerdo que será oficial tras el reconocimiento médico.
Las negociaciones se aceleraron después de que el técnico del primer plantel, Pepe Mel, decidiera no incluir al artillero en su lista de convocados para el stage de El Portil.
Entonces, y a petición del propio delantero, Rufián buscó el destino ideal para un punta con una excelente reputación en Italia, ya que su papel en el Europeo sub17' de 2008 fue sobresaliente.
Desde entonces, su nivel de protagonismo remitió de manera repentina y en el anterior ejercicio sus números en ataque, unidos a su relación con Oli, técnico del B, propiciaron un nuevo panorama.
Rufián comunicó a Miguel Valenzuela y Manuel Castaño, responsables de la cantera del Real Betis, que el pasado viernes ya se había concretado el fichaje del '9', por el que Betis exigirá una compensación económica vía judicial.
Si no existe acuerdo entre el presidente de los rossoblu, Francesca Menarini, y los rectores de la entidad de La Palmera habrá un contencioso jurídico.
Entonces será un magistrado el encargado de cifrar la cantidad de la indemnización. Según estipula la legislación, un club puede recibir por un canterano 360.000 euros en derechos de formación y promoción si firma un contrato profesional cuyos ingresos anuales superan el tope salarial establecido.
Sin embargo, los clubes de origen pueden garantizarse una determinada cifra con un contrato no profesional. Así, el Betis exigirá en el contencioso los 6 millones de euros que regulan la cláusula indemnizatoria del de Gavilán. En el fútbol actual hubo un antecedente que significó el inicio de la nueva legislación.
Así, el catalán Fran Mérida fichó por el Arsenal inglés en 2005 después de haber cumplido ocho campañas en La Masía. Los gunners únicamente pagaron los 270.000 euros que entonces se habían tipificado como compensatorios por los derechos de formación.
El Barça, empero, recurrió ante un juez para exigir una recompensa mayor. El magistrado, por la existencia de un contrato, condenó a los del Emirates Stadium a indemnizar con 1,3 millones de euros al club azulgrana.
'Blindaje'
Debido a la operación del Bolonia, los responsables de la cantera heliopolitana se han movilizado y, tras una primera ronda de reuniones, han estimado que Razak, Damián y Ezequiel firmen un contrato profesional en el B.
La legislación deportiva exige que cuatro integrantes del filial gocen de una vinculación contractual de ese tipo, un requisito que para el granadino Ezequiel supondrá su blindaje. Su cláusula de rescisión rondará los 10 millones de euros.
Y en la primera plantilla, Mel trata de aligerar la nómina de integrantes. Así, el Getafe de Ángel Torres ha sondeado a Luis Oliver, consejero deportivo verdiblanco, para indagar sobre cuáles son sus exigencias económicas ante una posible venta de Achille Emana.
En La Palmera piden 7 millones de euros, aunque la necesidad de venta podría reducir de forma notable el montante inicial. El cordobés Toni Muñoz, director deportivo del Getafe, ya ha trasladado una primera propuesta, considerada insuficiente por los rectores andaluces.
