Jorge Molina se lleva el balón ante Lolo Pavón / Foto: Manuel Gómez
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El Betis eliminó al Lugo y se clasificó para los dieciseisavos de final de la Copa del Rey a pesar de perpetrar otro partido espantoso en el que fue muy inferior a su rival. El conjunto verdiblanco, al menos, se aferró a su seguridad defensiva, o al acierto de Dani Giménez más bien, para sobrevivir durante los 90 minutos del tiempo legal y los 30 de la prórroga. Pasó en los penaltis, el único tramo de toda la eliminatoria en el que pareció un equipo fiable.
El Betis salió al campo con un once-experimento: tres defensas, Matilla por delante, cuatro mediocampistas más avanzados y dos delanteros. El resultado en los 20 primeros minutos fue un equipo completamente desorientado, incapaz de dominar el balón pese a la acumulación de hombres en la medular e incapaz de frenar la verticalidad de su oponente, que casi marcó en un remate lejanísimo de David López (7') y, sobre todo, un mano a mano de Iago Díaz que resolvió Dani Giménez con seguridad (19').
Tras el segundo susto, el Betis ajustó líneas y poco a poco se fue sintiendo más cómodo en tan extraño sistema. Organizado por el joven Dani Ceballos, también comenzó a acumular ocasiones, como un cara a cara de Jorge Molina con Dani Mallo del que salió triunfador el meta visitante (22') y un derechazo del canterano al larguero (34').
La segunda parte fue un suplicio para los béticos. Su equipo, lejos de prolongar la mejoría ofrecida en el tramo final del primer tiempo, regresó a la vulgaridad, a la falta absoluta de juego. Y a ser peor que su rival, claro. El Lugo, que toca el balón con mucha más educación que el Betis, fue dueño absoluto de este parcial y se mereció pasar de ronda antes de la prórroga, aunque dejó las ocasiones para el descuento: Dani Giménez evitó que marcase Jon García y luego Samu cabeceó fuera.
El festival del portero verdiblanco continuó en la prórroga con un paradón a un derechazo con efecto de Ferreiro. Luego perdonó Lolo Plá, de cabeza sin oposición, y después le tocó a Kadir indultar al enemigo, aunque desde luego fue la ocasión menos clara. En la segunda mitad, por lo menos, el Betis equilibró la contienda, impulsado por un Lolo Reyes redivivo. Cojo, pero redivivo. Y eso le bastó para alcanzar la tanda de penaltis tras otra vergonzosa actuación colectiva.
En los penaltis, Dani Mallo estuvo más cerca de parar algún lanzamiento que Dani Giménez, pero lo que son las cosas: los jugadores verdiblancos tuvieron el tino que no habían mostrado en los 120 minutos anteriores y David López erró la penúltima pena máxima. Cejudo marcó el gol de la clasificación y el beticismo agradeció el pase... con una pitada.
REAL BETIS: Dani Giménez; Molinero, Bruno (Cejudo, m. 78), Jordi; Matilla; Piccini (Kadir, m. 46), Dani Ceballos, Lolo Reyes, Álex Martínez; Jorge Molina (Rennella, m. 64) y Rubén Castro.
CD LUGO: Dani Mallo; De Coz, Pavón, Jon García, Samuel, Álvaro Peña (Iriome, m. 95), Seoane, David Ferreiro (Aganzo, m. 106), David López, Iago Díaz (Lolo Plá, m. 71) y Luis Fernández.
Árbitro: Pizarro Gómez (Comité Madrileño). Amonestó a Lolo Pavón (58'), Molinero (80'), De Coz (81') y Jordi (89').
Penaltis: Luis Fernández, 0-1. Rubén Castro 1-1. Aganzo, 1-2. Matilla, 2-2. Lolo Plá, 2-3. Kadir, 3-3. Jon García, 3-4. Rennella, 4-4. David López, fuera. Cejudo, 5-4.
Incidencias: partido de los 1/32 de final de la Copa del Rey, disputado en el estadio Benito Villamarín.
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