Pepe Mel, lejos de castigar a sus jugadores tras el mal partido de este domingo en el Vicente Calderón, les da dos días de descanso. La razón: el Betis no regresa a la competición hasta el lunes 11, cuando jugará en el Benito Villamarín ante el Valladolid, por lo que no entrenará hasta la mañana del miércoles.
El equipo ha regresado este mediodía a la capital hispalense, aunque muchos de los jugadores se han quedado en Madrid estos días, entre ellos el protagonista del post-partido, Antonio Amaya.