La exposición Prohibido el cante. Flamenco y fotografía -en alusión al mensaje que figuraba en diversos carteles durante el Franquismo-, que se inaugura hoy en Sevilla, reúne más de 200 imágenes con temática flamenca tomadas por setenta fotógrafos como Henry Cartier-Bresson y Man Ray.
Se trata de fotografías costumbristas relacionadas con el mundo del flamenco, sus cantaores o bailaores, que fueron captadas desde 1887 hasta la actualidad por fotógrafos españoles y extranjeros que las tomaron en diferentes lugares del mundo y que constituyen una crónica del último siglo y medio del flamenco. Un primer plano gigante y en blanco y negro del rostro del cantante Falete, tomada por el fotógrafo colombiano Ruvén Afanador, -quien consiguió un gran éxito con su exposición en la última Bienal de Flamenco-, es una muestra de una exposición que "va a remover los sentimientos de los visitantes", según dijo ayer Rosa Torres, la consejera de Cultura de la Junta de Andalucía.
"Es un acercamiento antropológico, cultural y político que trasciende la mera exposición", aseguró José Lebrero Stals, el director del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. "Siempre me he preguntado qué tiene el flamenco que atrae a tantas personas", y ha recordado cómo cientos de fotógrafos y artistas internacionales han plasmado "la energía y singularidad de esa cultura".
Xosé Luis García Canido, el director de Proyectos de la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales, ha asegurado que la exposición pretende "darles un lugar a los seguidores de un modo continuado del flamenco", porque "les corresponde estar también en museos y centros de arte". "Nadie tiene la última palabra para definir dónde empiezan o acaban los límites del flamenco", ha recalcado Canido, quien también ha recordado que durante los miércoles de mayo se realizarán visitas guiadas por la exposición por expertos.
También se ofrecerá un teatro musical infantil, Flamenquita, la niña que perdió el compás, durante los tres últimos domingos de mayo y el primero de junio "para acercar a los más pequeños también al flamenco", concluyó Canido.
