La previsible fiesta del Cajasol para celebrar su pase a la Copa del Rey quedó en cierto modo ajada por haberse sellado el billete para Bilbao al mediodía y gracias a las derrotas ajenas, pero ese contratiempo fue compensado con una sufrida victoria ante el Suzuki Manresa, que acudía a San Pablo a jugarse sus opciones y las tuvo, pero no pudo impedir el décimo triunfo de los hombres de Joan Plaza.
Ambos contendientes habían iniciado el duelo muy parejos, con rápidas transiciones y notable acierto en el tiro exterior, siendo Tyrone Ellis y Andrés Miso los artilleros cajistas y el ucraniano Sergiy Gladyr el replicante manresano.
Derivándose de ello un equilibrio cuasi permanente en el electrónico de San Pablo, con ventajas nunca superiores a los cuatro puntos hasta bien entrado el segundo periodo.
Y de repente, se aceleró todo y se rompió la igualdad. La tercera falta de Cusworth, que estaba sosteniendo un bello pulso con Triguero, fue la primera señal, a la que se sumó la fulgurante irrupción de Mo Ager, que sin embargo desapareció del mapa de manera aún más estrepitosa, tras cometer su cuarta falta, protestarla y ganarse una técnica.
Tras la tormenta, con todo, salió el sol para el Cajasol, que enlazó un parcial 10-1 (39-28, m. 19) antes del esperpéntico episodio del colegiado principal y de enfilar los vestuarios. A la vuelta, sevillanos y catalanes recobraron la lid con similar intensidad a la del arranque.
Savanovic y Triguero subían enteros a la par que la defensa para llevar el margen local a la barrera de los diez puntos, pero el Suzuki, cual hormiguita, recortaba sumando de uno a uno desde la línea de personales.
El despegue de los hombres de Joan Plaza se mascaba, pero hacía falta elevar unos grados más la temperatura defensiva, y eso es justamente lo que ordenó el técnico barcelonés. Una presión a toda cancha que empezó a ahogar las ofensivas manresanas, incapaces de anotar canasta de campo alguna durante ocho minutos del tercer acto.
Con todo, al último periodo se llegaba con esa decena de puntos que nunca es definitiva si enfrente está el conjunto catalán. Y así quedó de manifiesto en unos minutos que fueron una guerra de nervios, faltas, imprecisiones y escaso tino por ambos bandos, pero del que sacó tajada el conjunto visitante, que estrechó el cerco por medio de Gladyr hasta anularlo Ivanov a base de tiros libres y con un triple letal a 1'32" (55-59).
Pero, ya lo decíamos ante Alicante, este Caja no se rinde y debe tener hasta cierta diosa de su lado: tras el 7-0 final, viajará a la capital vizcaína con la maleta repleta de victorias y moral.
Ficha técnica:
62 - Cajasol (18+21+15+8): Calloway (2), Ager (8), Kirksay (2), Savanovic (12), Xavi Rey (5) -quinteto inicial-, Satoranski (0), Ellis (8), Triguero (8), Sastre (0), Miso (15) y Radenovic (2).
59 - Suzuki Manresa (18+12+14+15): San Miguel (5), Montáñez (9), Grimau (3), Ivanov (12), Cusworth (8) -quinteto inicial-, Llorca (2), Alzamora (3), Gladyr (13), Daniel López (4) y Larry Lewis (0).
Árbitros: Hierrezuelo, Santiago Fernández y Castillo. Eliminaron a los locales Ager (m. 20) y Calloway (m. 35), y a los visitantes Cusworth (m. 31) San Miguel (m. 40).
Incidencias: Partido de la 16ª jornada de la Liga ACB disputado en el Palacio de los Deportes San Pablo ante 6.000 espectadores.
