El Cajasol ha firmado este domingo un trascendental triunfo en Sebastián (75-77) que se traduce en tranquilidad para afrontar el tramo final de la fase regular. Ha dominado todo el partido al Lagun Aro, pero cuando la reacción local parecía conducir la contienda a la prórroga surgió la figura de Pops Mensah-Bonsu, quien con un postrero palmeo sellaba la victoria, dejando a los vascos a una distancia de tres más el básket average (en la ida también venció por 73-57).
Era una primera final en la que los de Aíto se jugaban respirar con alivio y estuvieron a la altura desde el principio, certificando el undécimo triunfo de la temporada y el quinto a domicilio. Además, se encadena a la del pasado sábado para cambiar el paso y afrontar tanto la Feria como el derbi andaluz del próximo sábado con más confianza.
Mensah-Bonsu le puso la guinda a su mejor partido con la camiseta del Cajasol (12 puntos y 8 rebotes, para 14 de valoración) siendo decisivo, no menos, de todas formas, que Joan Sastre (15 puntos, 4 rebotes y 2 asistencias), MVP del partido ex aequo con Doblas (19 puntos); Satoransky, autor de 16 puntos, 4 rebotes y 2 asistencias, para 16 de valoración; o Bogdanovic, quien contribuyó con 10 puntos y 4 rebotes.
En un partido en el que ambos equipos mostraron una gran igualdad en muchas facetas, el dominio del rebote (44, por 32 del Lagun Aro) ayudó al Cajasol a dominar a un rival atenazado por los nervios desde el principio. El cuadro cajista se fue haciendo con las riendas gracias sobre todo al juego exterior y al buen hacer de Sastre. En el Lagun Aro GBC, el brasileño Neto hacía lo que podía para mantener a su equipo cerca en el luminoso, aunque ya se abría brecha en el marcador (15-21).
En el segundo cuarto, la tónica no cambió, con un Cajasol férreo en defensa y moviendo bien la bola en ataque. Con diferencias favorables en torno a diez puntos, un increíble triple de Salgado permitiá al Lagun Aro llegar con esperanza al descanso y apelar nuevamente a la épica (37-44).
Tras el paso por vestuarios, el equipo guipuzcoano mejoró su ataque y se encomendó a una zona defensiva que le valió para acercarse. (44-50). No obstante, la tropa de Aíto se apretó los machos atrás y el ataque encontró los mejores momentos de Mensah-Bonsu para llegar al último acto en franquía (50-59).
Bogdanovic frenó el impulso donostiarra, pero los locales por primera vez se veían con opciones (62-64). Tras empatar el partido a 25 segundos (75-75), todo parecía en contra. Quedaba una posesión para evitar la prórroga y se la jugó Blakney, cuyo tiro palmeó Mensah-Bonsu para dar una de las grandes alegrías de la temporada justo cuando asoma por Sevilla el albero de la Feria de Abril.
