El Cajasol de Joan Plaza deberá ganar en San Pablo al Gran Canaria 2014 y esperar la derrota de Unicaja ante Caja Laboral si quiere conquistar la quinta plaza final en la liga regular, una posición de privilegio pensando en los cruces de cuartos de final que cedió a los malagueños al no ser capaz de vencer en la cancha de un Suzuki Manresa sin nada en juego.
Desde el calentamiento ya se percibían dos realidades diferentes que se enfrentaban en este partido: por un lado, el Suzuki Manresa, con los deberes hechos, se planteaba el partido como una fiesta, los jugadores hablaban e incluso reían mientras realizaban los estiramientos, ya que su único objetivo consistía en conseguir las mismas victorias que el año pasado.
En la otra canasta, la concentración de los jugadores del Cajasol se podía palpar; para ellos, terminar con buena nota pasaba por ganar, de manera que pudieran tener un cruce con Power Electronics Valencia que podría facilitar el play-off al ser el único equipo de los posibles emparejamientos al que ha ganado un partido esta temporada.
INICIO PROMETEDOR. El partido empezó tal como se calentó, con un parcial de 0-7 para el Cajasol. El conjunto manresano necesitó 2’38” para estrenar su marcador. Con un gran Triguero bajo aros y una buena defensa que permitía soñar con un cómodo triunfo, los de Joan Plaza dominaban, pero a partir del minuto 5 el técnico local, Jaume Ponsarnau, cambió a todo el quinteto inicial para iniciar la reacción y acabar el cuarto con un 14-19.
A partir de la fantástica defensa individual de los de Plaza, que impedía penetrar y tirar des de la pintura, Manresa optó por bombardear a base de triples, con un 4 de 5 intentos, más otros tres puntos en tres tiros libres al recibir Sergiy Gladir una falta en otro lanzamiento. Así, se llegó al descanso con un ajustado 31-32 que hacía justicia con el juego desplegado por ambos equipos.
MÁXIMA IGUALDAD. En el tercer periodo, continuó la igualdad pero fundamentándose en dos estilos diferentes: los de Plaza consiguiendo rebotes (29 por 19 de Manresa) pero perdiendo después muchos balones (13 por 8 del rival), mientras que los de Ponsarnau exhibían más tino en los tiros de 3 y libres. Pero una técnica al banquillo visitante provocada por un enfadado Tariq Kirksay cambió el estilo de juego, a partir de ese momento se perdió confianza y las fuerzas ya escaseaban.
UN PARCIAL DEMOLEDOR. En el último cuarto, el Cajasol se atragantaba en ataque, los tiros libres tampoco querían entrar. A pesar de ello, un triplazo de Earl Calloway permitía a los sevillanos tener esperanzas al ponerse de nuevo arriba (52-54).
Pero el final de partido estaba demasiado lejos. Enseguida otro triple de Sergiy Gladyr devolvía la ventaja a Manresa para irla ampliando ante el desacierto cajista. Un tremendo parcial de 20-4, con un final de verbena donde todo les salió bien a los locales, hundió a un Cajasol al que ni le quedaban fuerzas para meter los tiros libres. Así, el marcador se disparó hasta el 72-58, que no refleja lo igualado que fue el partido.
Ficha técnica:
72 - Suzuki Manresa (14+17+14+27): San Miguel, Grimau (13), Gladyr (22), Ivanov (4), Cusworth (2) -cinco inicial-, Alzamora (7), López (3), Montañez (6), Llorca (2) Lewis (13), Vinicius Toledo y Costa.
58 - Cajasol (19+13+12+14): Calloway (14), Ellis (10), Kirksay (2), Savanovic (17), Triguero (7) -cinco inicial-, Miso (5), Satoransky, Rey (1), Radenovic (2) y Douglas.
Árbitros: Francisco José de la Maza, Jorge Javier Murgui y Juan José Martínez, que eliminaron por cinco faltas a Tyrone Ellis (min. 40).
Incidencias: partido de la trigésimo tercera jornada de la Liga ACB disputado en el pabellón del Nou Congost ante 4.900 espectadores.
