El Cajasol, con sólo un triunfo en la primeras cinco jornadas de la Liga Endesa, intentará mañana enderezar el rumbo en esta temporada y para ello espera que el factor cancha le ayude a superar a un exigente rival como el Valencia Básket, que hasta el momento solo ha perdido un partido.
El equipo sevillano, después de lograr la victoria en su anterior comparecencia en el Palacio de los Deportes de San Pablo ante el Herbalife Gran Canaria, volvió a perder en la pasada jornada y también a dar una pobre sensación en la cancha del Blusens Monbus, donde cayó por veintiún puntos (82-61).
La formación que dirige el técnico madrileño Aíto García Reneses, la mas joven de la ACB, recibe ahora a un rival que llevaba un pleno de cuatro victorias y que perdió su primer partido en la anterior jornada, en Madrid ante el Asefa Estudiantes (85-82), con lo que equipo valenciano llegará a Sevilla con el ánimo de no salir de vacío de este doble desplazamiento consecutivo.
El choque de mañana marca, además, el comienzo de un frenético noviembre para el Cajasol en el pabellón de San Pablo, ya que al equipo hispalense le esperan hasta cinco partidos como local en este mes entre la Liga y la Eurocopa, algo que puede adquirir trascendencia en su progresión deportiva.
Para este partido, García Reneses tiene la baja del pívot estadounidense Bradley Buckman, que estará ausente entre tres y cuatro semanas a causa de una rotura fibrilar de grado I-II en el recto anterior del muslo izquierdo.
Buckman se produjo la lesión en el entrenamiento vespertino del pasado lunes.
