El Cajasol se reencontró por fin con la victoria y lo hizo a costa del colista y ya descendido La Bruixa dOr, al que sometió con notable comodidad gracias a un comienzo arrollador (2-15) y a la noche inspirada del trío integrado por Tomas Satoransky, Joan Sastre y Luka Bogdanovic.
Era la despedida de Jaume Ponsarnau del Nou Congost tras un década como técnico en Manresa, pero su equipo no pudo dedicarle el triunfo ante el Cajasol, que se mostró muy superior.
La afición manresana dijo adiós a la Liga Endesa con un partido insulso, carente de defensa y que no tuvo otro aliciente para los locales que el de despedir a Ponsarnau y también a algunos jugadores que, como el técnico, se llevaron la ovación del público.
A pesar de la victoria, la nota negativa para el Cajasol, que tampoco se jugaba nada al haber sellado ya la permanencia, fue la lesión de Latavious Williams en el primer cuarto.
Los sevillanos mandaron durante todo el partido. La Bruixa dOr, que fue siempre remolque, mostró dos caras bien diferentes en función de quién era el director de juego, Álex Hernández o Joan Creus.
Los andaluces pudieron tomar distancia en el marcador desde el primer momento, en gran parte gracias al espectacular desacierto de los catalanes. Con 2-15 en el marcador, después de un triple de Satoransky, Ponsarnau pedía tiempo muerto.
La reacción local no llegó hasta la entrada en pista de Creus. Los números cantan: hasta ese momento, con Hernández en la dirección, el parcial fue de 3-17. Con Creus, un parcial de 8-2 permitió a La Bruixa dOr no hundirse (11-21, m.9).
En el segundo período, el equipo manresano aumentó su acierto y consiguió reducir la diferencia a 8 puntos (26-34, m.13). Es lo más que consiguió acercarse al rival. Volvía Hernández y el casillero local de nuevo no crecía (26-40, m.17), lo que obligaba a Ponsarnau a dar entrada de nuevo a Creus. Un triple del base catalán dejaba el marcador 35-46 al descanso.
A la vuelta, no hubo reacción local y el Cajasol pudo mantener la diferencia sin apenas sudar. La inexistente defensa local y el desacierto se lo ponían fácil. Hasta tres opciones de triple consecutivas falló La Bruixa dOr, mientras Blakney anotaba sin problemas (42-56, m.27). Bogdanovic y Sastre, también desde los 6,75, ampliaban la ventaja, que ya subía de los 20 puntos (42-65, m.30).
El último cuarto fue más de lo mismo y el Cajasol llegó a conseguir una máxima diferencia de 29 puntos (46-75, m.32). Laviña, otro de los que jugaban con sabor a despedida, anotó su triple 320 con el equipo de Manresa, convirtiéndose en el jugador con más triples en liga en la historia del conjunto catalán.
A parte del récord, los últimos minutos sirvieron a La Bruixa dOr para maquillar la paliza gracias a los puntos de Hanga (el mejor, con 19 puntos) y Aleksandrov. Así, la victoria para el equipo de Aíto García Reneses fue finalmente por 16 puntos (76-92, m.40).
