Veinte minutos tardó a mediodía de ayer el 32 desde José Laguillo hasta la Gran Plaza, uno de los recorridos en los que el Ayuntamiento tiene previsto implantar el carril bus a partir de este verano. La iniciativa cuenta con el beneplácito de usuarios y conductores pero éstos tienen claro que "lo que hace falta es que la gente lo respete".
Es la principal queja de los conductores de Tussam : que los vehículos particulares no solo usan el carril bus sino que incluso aparcan en doble fila invadiendo éste y hasta las paradas. "En el Hospital Macarena se ponen los coches para entrar al parking en la parada y en Eduardo Dato a la altura del Portaceli hay veces que das varias vueltas y te encuentras el mismo coche aparcado en doble fila en el carril bus durante todo el día", se quejan Antonio Sánchez y Antonio Moreno mientras esperan para hacer el relevo en la parada del 32 de Gran Plaza.
Sánchez guarda en su móvil fotos de los obstáculos con los que cada día se encuentra en las zonas donde ya existe carril bus. Asegura que en su trabajo, en una hora ve "cuarenta o cincuenta infracciones de tráfico". Su compañero denuncia situaciones como las de Ingeniero la Cierva, en la carretera de Su Eminencia, donde "hay que ir sorteando los puestos del mercadillo que se pone". "El otro día había uno vendiendo sandías en la misma parada, le pité y encima me dijo que lo rodeara", coincide Sánchez.
El Ayuntamiento prevé ampliar en 40 kilómetros el trazado del carril bus en la ciudad para completar tres anillos. Las obras se realizarán en tres fases, comenzando este verano por el eje José Laguillo-Luis de Morales-Eduardo Dato; Alcalde Manuel del Valle-Éfeso-Ronda del Tamarguillo; y Avenida Montes Sierra-Ramón y Cajal-San Juan de Ribera. Tras esta primera fase, el proyecto -con un presupuesto de 2,5 millones de euros- prevé una segunda por la Avenida de Andalucía, desde Torneo a la Ronda de Triana, de la Borbolla a la Avenida de la Paz y por Doctor Fedriani; y una tercera para implantar carril bus en Kansas City, el Paseo de las Delicias, la Avenida Cardenal Bueno Monreal, Diego Martínez Barrios y Virgen de Luján.
El objetivo es aumentar 0,5 kilómetros por hora la velocidad comercial media de los autobuses, que en el último mes se situó en 12,85 kilómetros por hora .
Mari Carmen coge cada día el 2 desde la Ronda del Tamarguillo hasta el Hospital Macarena, donde trabaja, un recorrido en el que tarda "entre 20 y 25 minutos". Ayer, sobre las dos de la tarde, el autobús tardó 15 minutos desde la parada de la Ronda del Tamarguillo en el cruce con Ramón y Cajal hasta la calle Alcalde Manuel del Valle. Si en el eje de Nervión el problema es la alta densidad del tráfico, al ser una zona comercial y gran arteria de la circulación por la que además discurren varias líneas de Tussam, en esta zona, de calles y avenidas muy amplias, el problema principal son los aparcamientos indebidos que entorpecen el tránsito y obligan a los autobuses a maniobrar. Mari Carmen aplaude la idea del carril bus ya que cree que "llegaríamos antes" pero reconoce que "si pusieran el Metro sería mejor, es lo mejor que han inventado".
La nueva red de carrilles bus será de uso compartido entre los vehículos de Tussam y las motocicletas. Algo que no entusiasma a los conductores. "Yo tengo moto pero veo mal que se comparta el carril porque aquí la gente no conduce bien, aprueba el examen pero no sabe circular. Es sin carril bus y las motos se nos meten si dejas un metro entre el autobús y la parada cuando abres la puerta. Y lo de las bicis es otra, si tienen un carril para ellos en la acera, pues nada, se meten en la calzada", denuncia Sánchez.
