La empresa que se instalará en el paseo Catalina de Ribera ofrecerá un servicio como el del parque de María Luisa.
Una tienda de alquiler de bicicletas para turistas igual que la que hay en el parque de María Luisa. En esto se ha quedado el anunciado Centro Integral de la Bicicleta que se va a ubicar en uno de los antiguos quioscos-bar de los Jardines de Murillo y el paseo Catalina de Ribera. El delegado de Urbanismo, Maximiliano Vílchez, aseguró en una entrevista con este periódico que hay dos empresas interesadas en el concurso que el Ayuntamiento abrirá «dentro de poco» para adjudicar esta concesión. Sólo resta el visto bueno de la Comisión de Patrimonio. La empresa ganadora terminará de construir el edificio.
Eso sí, el Centro de Integración de la Bicicleta, en un principio, se anunció como un espacio «inspirado en el servicio y la atención a la ciudadanía, así como en el fomento del uso de la bici en Sevilla para fines turísticos, como criterio de excelencia de la ciudad a nivel de Turismo Internacional y que incluyese actividades directamente relacionadas o complementarias que coadyuvasen al indicado fin». Así reza en el expediente aprobado por el consejo de gobierno de la Gerencia de Urbanismo del pasado 10 de noviembre. El objetivo es que fuera algo más que una tienda de alquiler de bicis especiales para pasear (de dos, cuatro o seis pasajeros), pero finalmente la oferta empresarial se limita a eso. No habrá información sobre el servicio público Sevici, ni sobre la red de carriles de la ciudad, ni sobre las políticas de movilidad y sus repercusiones en la salud o el medioambiente,... no será un centro integral de la bicicleta como tal.
Eso sí, el antiguo quiosco-bar (antes había tres en los jardines de Murillo:el Cristales, las Tres Carabelas y Al Sur) tampoco llegó a ser la sede de la unidad ciclista de la Policía Local, como lo planificó el anterior gobierno local de PSOE e IU. Entonces se dijo que se habían comprado las bicicletas, que se almacenaban en la antigua Jefatura de la Isla de la Cartuja, y que el cometido de estos agentes sería velar por que se cumpla la ordenanza de peatones y ciclistas, así como la vigilancia de los carril bici. En 2011 se aprobó el proyecto y se destinaron 228.591 euros a la reconstrucción del edificio. En julio de 2013 el actual equipo de Zoido adscribió el inmueble, a medio construir, a Urbanismo para licitar el Centro Integral.
Lo cierto es que los grupos de la oposición, PSOE e IU, así como colectivos ciudadanos critican que el Gobierno de Zoido ha dejado aparcada la bicicleta. El alquiler público (Sevici) se desploma: en 2013 se cerró con 750.000 alquileres menos (17,6%) y la pérdida de más de 6.000 abonados (12,6%). Pero estos malos datos no le quitan el sueño al Ayuntamiento, que asocia tal descenso a un trasvase de usuarios hacia la bicicleta privada. Sin embargo, no tiene en cuenta que Sevici desde 2011 ha subido tres veces sus precios, pasando su abono anual de 10 a 30 euros ni que ha desaparecido la política para incentivar el uso de la bici pública como ocurría durante el anterior mandato, donde se suscribían convenios de colaboración con entidades y asociaciones.
Con todo, el Gobierno municipal del PP defiende que no abandonó la bicicleta y que botón de muestra son los 620.000 euros que destinará en los próximos dos años para la conservación de los 165 kilómetros de carriles bici, la ejecución de tramos en Hacienda El Rosario, Higuerón Sur, Nuevo Amate y El Pítamo Sur o, precisamente, el inicio del proyecto del Centro Integral de la Bicicleta, reducido a una tienda de alquiler de bicis para los turistas como la del parque de María Luisa.