El ayuntamiento de Dos Hermanas ya ha informado a los vecinos de Olivar de Quintos que falta un mes para licitar la obra del centro social y deportivo que se construirá en el barrio quiteño. El proyecto, que pagarán los propios socios, lleva demandándose desde hace unos siete años. El club admitirá a gente de la capital hispalense.
"Los socios se han cargado de paciencia estos años, pero se les está agotando" comentó el viernes el tesorero del club Olivar de Quintos, Antonio Gómez. Por eso la directiva del Club del barrio quinteño ya ha anunciado en su web que el concejal de Urbanismo, José Manuel Carrión (PSOE), informó que en un mes estaría licitado el proyecto de obra.
De este modo, los vecinos de Olivar de Quintos, que hace más de un lustro se embarcaron en el proyecto de construcción del club social podrán tener el espacio de ocio y deporte para "criar a gusto a nuestros hijos" resaltó Gómez, "con este complejo - prosiguió - al menos sabremos dónde pasan el tiempo los chicos". Fianlmente, tras barajar varios terrenos, el centro se ubicará en el solar situado entre las calles Genciana, Caléndula y Lúpulo.
El espacio cedido por el ayuntamiento es de más de 13.000 metros cuadrados, y albergará en su interior cinco pistas de tenis, seis de pádel, una pista polideportiva, una piscina de adultos y otra para niños y una guardería, para lo que habrá que contratar monitores.
El edificio donde estará la sede social será de tres plantas, y tendrá un restaurante, una cafetería, una sala de lectura, de informática y de musculación, además de otro salón multiusos (donde se podrán realizar talleres de baile de salón o actividades parecidas) y una sauna.
Lo que es lo mismo, un proyecto con casi todas las ofertas de ocio que no sale nada barato: el presupuesto de toda la obra ronda los 2´5 millones, por lo que desde la directiva se estima que el club debería alcanzar los 400 socios (actualmente hay 190) para los gastos de cada uno no sea excesivo. "Ofertamos un paquete de acciones que podrán heredarse o traspasarse, y admitimos a todo el mundo" concretó el tesorero del club, que por cierto ya tiene interesados que viven en la capital hispalense. También admitirán a la gente que quiera participar y vivan el casco histórico del municipio nazareno.
Las tarifas para hacerse accionista del nuevo club son variables, según la antigüedad que se tenga: desde el número uno al 150 se pagó 5.500 euros, el intervalo del 151 al 175 abonaron 5.500, las inscripciones del 176 al 200 (donde se encuentra la lista actualmente) deben pagar la suma de 6.000 euros, y ya a los socios con números del 201 a 225 pagarán mil euros más que los del paquete anterior.
Esta es la forma que tiene el club de premiar a aquellos que apostaron por el proyecto cuando sólo era un sueño "sin tener ni boceto, ni estudio, ni nada" resaltó Gómez, ya que los que ahora se están apuntando pueden ver algunos trámites realizados y los que se apuntarán en un futuro lo harán con gran parte de los trámites realizados. Eso sí, desde el club saben que algunos de los vecinos incrédulos prefieren esperar a ver "algo construido", aunque tengan que pagar más dinero.
