La vuelta a los colegios hoy pone a prueba el nuevo modelo de movilidad por el casco histórico del PP. El Ayuntamiento ha retirado ya todos los carteles instalados para advertir de las limitaciones de circulación por el casco histórico . Del Plan Centro sólo quedan ya los soportes de las señales y una veintena de cámaras que el gobierno local aún no ha aclarado si siguen o no grabando a los vehículos. No hay los refuerzos de transporte público prometidos, ni cambios en las vías para canalizar la circulación por el casco histórico. Las calles de entrada al Centro se dividen así entre aquellas, cuatro, con la circulación restringida, y el resto por las que los coches no tienen limitación alguna.
Los controles se realizarán a través de tres patrullas policiales que controlarán especialmente la calle Trajano y el acceso por Juan de Mesa, aunque habrá otra vigilando el resto de cruces. Pese a esto, no se trata de un plan especial por la vuelta al colegio sino una orden para todos los días laborables, según confirmaron fuentes policiales.
"No habrá ni más ni menos problemas de tráfico este inicio del curso que el pasado", argumentaba hace sólo unos días el portavoz del gobierno, Francisco Pérez. El Centro ha vuelto a la situación previa a la implantación de las cámaras en la pasada Navidad. Aunque con una diferencia: después de cuatro años de debate sobre la prohibición de acceder al Centro recogida por ordenanza desde 2007 y de mensajes del Gobierno advirtiendo de que se controlarán los accesos, se ha pasado a un llamamiento a que los coches retomen el casco histórico para reactivarlo. Y es esta semana, tras el regreso del verano y la vuelta a las aulas, cuando se puede evaluar el efecto de este mensaje.
A finales de julio las asociaciones de padres del Colegio Huerta de Santa Marina o el IES San Isidoro ya expresaron su preocupación por los problemas de tráfico que se podían generar ante la derogación sin alternativas del Plan Centro.
Desde entonces hasta ahora poco ha cambiado en las calles del Centro salvo una nueva señalización instalada a lo largo del mes de agosto. Aunque en la página web municipal sigue indicado que el Centro es una zona restringida al tráfico por la que no se puede circular más de 45 minutos, cualquier vehículo puede acceder sin límite alguno por Baños -una de las calles más colapsadas durante los últimos años-, Curtidurías, Barqueta, San Luis, Puerta de Córdoba, Maestro Quiroga, Trinidad, Mateos, Puñoenrostro, Puerta de Carmona, Estella o Nuñez de Balboa. No hay indicación contraria a cruzar la Alameda o llegar a Puerta Osario.
Sí se han señalizado, sin embargo otras restricciones. El acceso al Centro por San Pablo sigue supuestamente limitado al tráfico. Sólo pueden entrar servicios públicos, usuarios de aparcamientos, carga y descarga y vehículos acreditados. Señales similares, no iguales, se pueden encontrar en Dos de Mayo, Real de la Carretería y Trajano, que obliga supuestamente a abandonar el Centro tras atravesar la Alameda. Sobre el papel no se puede acceder a estas vías a ninguna hora. Ningún día. Aunque ayer, domingo, día antes del inicio del curso, se podía desplazarse en coche con total libertad.
A partir de hoy sí habrá controles policiales. La instrucción de los agentes es clara: si no tienen una acreditación de residentes y quieren acceder por algunas de las entradas señalizadas podrán ser bien desviados a otro punto o directamente denunciados. Eso sí, sólo en las entradas prohibidas.
