-El viernes pasado tomó posesión de su cargo así que desde ese día es, oficialmente y por otros cuatro años más, presidente del Colegio de Médicos de Sevilla. Y comienza el mandato estrenando estatutos...
-La ley nos obliga, pero es cierto que ya veníamos trabajando en esto en la anterior legislatura para que en cuanto comenzara ésta entraran en funcionamiento. Son pequeñas adaptaciones que consolidan el papel del Colegio al haber sido aprobados por su asambleas y por la Consejería de Salud y que tienen sus ventajas.
-¿Cuáles?
-Pondré varios ejemplos. Antes, en las elecciones, se elegían a los candidatos en grupos y ahora las listas serán abiertas. El número de componentes de la Junta Directiva se reduce de 15 a 13. El voto por correo se ha obtenido hasta ahora de manera muy abierta y pasará a estar más controlado y a ser fiable. Habrá también una comisión específica para llevar los procesos electorales y esto dará más garantías de transparencia porque antes era el secretario del Colegio quien cumplía con esta función. Éste, sin embargo, podía estar implicado en alguna candidatura, lo que podía generar ciertas dudas.
-En las elecciones en las que usted fue elegido el pasado 25 de noviembre obtuvo 797 votos. Apenas votaron 1.128 de los 8.324 médicos colegiados. ¿Le preocupan estos bajos índices de votación y participación?
-El objetivo es que cada vez voten más, pero la lectura que hay que hacer es que los que no vinieron a votar confiaban en el voto de quienes sí lo hicieron. A todos los colegiados se les informó del proceso electoral y en los medios de comunicación éste tuvo su repercusión. En cuanto a los índices de votación, son bajos pero estos procesos electorales tienen estos índices. Salvo los políticos, como los comicios municipales, autonómicos o generales, el resto de procesos tienen una participación parecida o más baja que la que se dio en nuestros comicios. Pocos días antes de éstos, por ejemplo, la hermandad de la Macarena celebró elecciones y de unos 9.000 hermanos votaron 2.500...
-Desde la campaña electoral ha venido remarcando un mensaje: la modernización del Colegio. ¿A qué se refiere?
-Me refiero a la adaptación que vamos a emprender debido a Ley Ómnibus, que entró en vigor el pasado 27 de diciembre [se refiere a la Ley 25/2009, de 22 de diciembre sobre el libre acceso a las actividades de servicios y su ejercicio. Esta ley adapta, a su vez, la legislación europea: 2006/123/CE]. Los cambios que va a favorecer la entrada en vigor de esta ley serán la ventanilla única, el impulso a los trámites por internet y la creación de una oficina en el Colegio para atender a las quejas de los usuarios. Para hacer esto, la ley da un plazo hasta el 27 de junio.
-¿Cómo se va a adaptar el Colegio a las nuevas tecnologías?
-Se podrán hacer todo tipo de trámites por internet, como por ejemplo colegiarse o descolegiarse. Esto responde al concepto de ventanilla única, a través de la cual también se va a dar formación, docencia, asesoría jurídica... Es una modernización muy importante que vamos a poner en marcha en uno o dos meses, cuando entre en funcionamiento la nueva página web del Colegio.
-La Ley se da otro plazo, este de doce meses, para decidir qué sectores profesionales han de tener colegiación obligatoria. ¿Espera usted que sea el de los médicos?
-Sí, porque la colegiación obligatoria está implantada en toda España salvo en tres comunidades (Andalucía, Extremadura y Canarias) y no tiene sentido que unos médicos tengan unas obligaciones distintas según en qué autonomía residan. Esto no tiene sentido. Todos los médicos que trabajen en España deberían estar sometidos a lo mismo porque la colegiación no pretende nada raro, sólo velar por el control de la profesión y por que los profesionales que ejerzan la medicina lo hagan en el seno del colectivo profesional de médicos.
